¡Menudo susto! Barcelona - Almería: 3-1

En lo que era el partido anterior al gran clásico ante el Real Madrid, el Barça logró una victoria sufrida y a punto estuvo de dar un buen susto. No jugó bien el Barça. Guardiola rotó buscando dar descanso y el equipo no estuvo en ningún momento todo lo fino que acostumbra. Aún así, no se puede hablar de victoria injusta, ni mucho menos. El Almería sólo llegó en una ocasión y fue gol.

La primera parte fue extremadamente aburrida. El Barça rondó el 80% de posesión pero tampoco llegaba en demasiadas ocasiones al área rival. El Almería por su parte, nada de nada. El Barça contó con 4 o 5 ocasiones en esa primera mitad, aunque sólo 2 de ellas fueran de las claras: un disparo alto de Thiago tras un jugadón de Bojan por banda derecha y un lanzamiento al palo de Messi cuando ya se terminaba la primera mitad. Iniesta, Bojan y el propio Messi lo intentaron, pero no lograban llegar con demasiado peligro a las inmediaciones del portero del Almería. La peor noticia de esta primera mitad llegó con la lesión de Bojan, que lo mantendrá alejado de los terrenos de juego hasta la próxima temporada. Con el 0-0 inicial se llegó al descanso. El Barça necesitaba ganar para no complicarse la vida y mantener la ventaja de 8 puntos de ventaja con el Madrid para su visita al Bernabéu, pero no lo lograba.

En la segunda parte el Barça salió con la clara intención de dejar el partido sentenciado lo antes posible. De este modo, ya en el minuto 3, Villa (negado de cara al gol en estas últimas semanas) estrelló un balón en el palo de Diego Alves. Pero sólo un minuto después, son las cosas que tiene el fútbol, en un córner lanzado por el Barça llegó el gol del Almería en una contra de libro entre Crusat, Piatti y Corona en la que falla de manera estrepitosa Gaby Milito (muy lejos de su mejor nivel) y en la que el canterano madridista adelantó al Almería en el Camp nou. En ese momento se vinieron encima todos los viejos fantasmas y ya me veía iendo al Bernabéu con sólo 5 puntos de ventaja. Había liga. Sin embargo, poco dura la alegría en la casa del pobre y sólo 2 minutos después un extraordinario pase largo de Milito lo aprovechó Villa para adelantarse a Alves y provocar un penalti clarísimo que Messi se encargó de transfromar. Menos mal que no dio tiempo ni a que nos pusiéramos nerviosos (casi). Tras el gol del empate, el Barça lo siguió intentando y Villa (por 2 veces) y Pedro tuvieron ocasiones clarísimas para hacer el segundo, pero no estuvieron finos. Tuvo que ser Thiago quien a la salida de un córner botado por Messi hiciera el gol mediada la segunda mitad. De ahí al final, fútbol control del Barça y pocas ocasiones de gol, sólo un remate en propia puerta de Acasiete y el gol en el descuento de Messi que hacía el 3-1 definitivo: error garrafal de Marcelo Silva y el argentino que no lo desaprovecha para plantarse solo ante Alves y batirle por alto.

Con ese 3-1 se llegó al final del encuentro. Al Barça le costó más de lo esperado deshacerse del colista en el Camp Nou, pero lo importante es que lo logró y llegará con 8 puntos de ventaja al partido del Bernabéu. Una derrota hubiera abierto la lucha por la liga de nuevo. Ahora toca desplazarse a Ucrania a cumplir el trámite ante el Shakhtar (siempre teniendo en mente el precedente del Betis) y el próximo fin de semana viajamos al Bernabéu. Parece un partido intrascendente (y más teniendo en cuenta que 3 días después se juegan la final de la copa), pero una derrota de cualquiera de los dos equipos podría o bien dejar la liga sentenciada o abierta a falta de 6 jornadas, junto con el correspondiente componente moral. Desde aquí, mucha suerte.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!