domingo, 15 de abril de 2012

Todo abierto tras el patatal de San Siro. Milán - Barcelona: 0-0

El Barça volvió de Milán con un engañoso empate a cero tras un apasionante partido celebrado sobre un patatal. Vayamos por partes: el resultado es engañoso porque no marcar fuera de casa no creo que sea positivo en eliminatorias a doble partido, pero por otro lado lo deja todo abierto para la vuelta en el Camp Nou; el partido fue apasionante, jugado de poder a poder, sobre todo en la primera mitad, a pesar de la asusencia de goles; y por último, el campo fue un verdadero patatal, de vergüenza, el piso se levantaba a la mínima e influyó clara y negativamente en el espectáculo (y especialmente en nuestro juego).

La primera parte fue vistosísima, jugada de poder a poder y con claras ocasiones para ambos equipos. Esto propiciado, en parte, por el 3-4-3 con el que salió Guardiola en San Siro. Esa alineación te permite tener muchas ocasiones, pero también dejas más espacios. Si no hubo goles fue por el estado del campo, los porteros y la ausencia de fortuna. La primera del partido fue para Robinho, tras aprovechar un rechace. Clarísima, pero la mandó a las nubes cuando tenía todo a favor. Tras ese susto inicial, el Barça fue poco a poco imponiéndose y comenzó a llegar con más peligro a la portería de Abbiati. Aun así, el Milán seguía llegándonos con peligro y Valdés tuvo que sacar a relucir su clase en un disparo de Ibrahimovic. Pero prácticamente el resto de ocasiones fueron nuestras: Alves, Alexis e Iniesta rondaron el gol. La más clara, la de Xavi, pero no pudo pegarle bien por el mal estado del césped y atrapó Abbiati. El Barça estaba jugando bien y, probablemente, mereciendo más, pero al descanso se llegó con el 0-0 inicial.

En la segunda mitad, el guión fue muy similar: control absoluto del partido del Barça, pero no logró llegar con tanto peligro como lo hiciera en la primera parte. De hecho, prácticamente no tuvimos ocasiones hasta que salió Tello al campo y revolucionó el partido (como nos tiene acostumbrados este año el castellano). En el 74, tuvimos la primera ocasión clara de esta segunda parte en la que Tello estuvo egoísta (y se llevó la bronca de Messi por ello, de hecho). Después, un par de ocasiones de Messi que lograron desbaratar entre los defensas y el portero del Milán y un clamoroso penalti sobre Puyol no pitado. No pudimos hacer gol y el partido terminó como empezó: 0-0.

Esto quiere decir que todo se decidirá en el Camp Nou en una semana. Nos vale cualquier victoria, pero el resultado no es el más positivo posible. Desde luego, habrá que tener un 100% de concentración. Antes, a pensar de nuevo en la liga porque el encuentro de este fin de semana no es fácil: recibimos al Athletic de Bielsa. Nos jugamos, al menos, mantener los 6 puntos de ventaja y, con un poco de suerte, y si Osasuna nos echa una mano, reducir esa ventaja.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Paso al frente en el Ciutat de Valencia. Levante - Osasuna: 0-2

Osasuna certificó de manera provisional la permanencia un año más en la máxima categoría del fútbol español en la jornada 30 (es decir, a falta de 8, algo a lo que no estamos muy acostumbrados en Pamplona) y lo hizo de la mejor manera posible, ante el que va a ser, sin lugar a dudas, un rival directo en la lucha por puestos europeos (y que está siendo la sensación del campeonato), el Levante. Y lo hizo además en su campo.

Fue un partido muy serio de los rojillos. En el minuto 15 Raúl García hacía el primero tras un saque de banda largo de Bertrán que el de Cizur transformó en el primero de la tarde con un zurdazo espectacular desde la frontal. Sólo 2 minutos después, Nino estuvo a punto de hacer el segundo. Eran minutos de dominio osasunista, pero la balanza cambió y a partir de ese momento el dominio fue mayormente del Levante. Comenzó avisando con un cabezazo de Koné alto, aunque a esta ocasión respondió con otra de Raúl García (solventada con un paradón de Munúa). Pero los últimos 15 minutos de la primera mitad fueron de asedio del equipo granota. Valdo en el 28, Xavi Torres en el 34, Barkero en el 36 y Ghezzal en el 41 y en el 44 (doble ocasión) no lograron hacer el empate. En muchas de esas ocasiones, fue Andrés el que nos mantuvo de pie en el partido. El Levante había ido de menos a más, pero al descanso lo que valía era el gol de Raúl García. 0-1.

De todos modos, algo teníamos que cambiar en el descanso, porque de reproducirse lo que había ocurrido en los últimos minutos de la primera parte, está claro que no habríamos podido mantener nuestra portería a cero mucho tiempo. En parte, lo logramos, aunque Andrés continuó siendo el protagonista principal del encuentro: primero sacándole un cabezazo a Xavi Torres y luego un mano a mano a Koné. También Munúa tuvo que realizar un paradón a cabezazo de Raúl García. El Levante había desperdiciado incontables ocasiones y, como reza el refrán, lo acabó pagando caro: Raúl García robó un balón en la salida de balón del Levante y se lo dejó a Nino para que sentenciara el partido. Por fin marca el canario. Ese gol llegó en el minuto 79 y terminó de matar el partido. Nada más resañable ocurrió hasta que el árbitro pitó el final del partido.

Importantísima victoria rojilla que nos hace sumar 43 puntos (por lo que estamos virtualmente salvados) y, lo que es más importante, nos aupa al sexto puesto y nos vuelve a meter en la lucha por posiciones europeas (estamos, de hecho, sólo a 4 del cuarto puesto). La semana que viene recibimos al Madrid en lo que es una muy buena oportunidad de ayudar a mis dos equipos. Esperemos que esta victoria nos dé la confianza suficiente. Desde luego, la necesitaremos…

¡AUPA OSASUNA!

sábado, 14 de abril de 2012

Continuamos con la persecución. Mallorca - Barcelona: 0-2

De regreso yo ya en España tras mi inolvidable experiencia en Las Vegas y después de muchísimas jornadas en que Barça y Osasuna jugaban en el mismo día (5 jornadas consecutivas, si no me equivoco), en esta jornada 30, volvían a hacerlo en días separados. El Barça buscaba mantener la distancia de 6 puntos con el Madrid logrando la victoria en Mallorca. Y lo logró, aunque con mucho sufrimiento.

El partido no fue nada lúcido para el Barça y no se sintió cómodo en ningún momento. Como suele ocurrir, teníamos muchísima posesión de balón, pero el Mallorca no parecía sentirse incómodo con el guión de partido que le planteábamos. De hecho, no lográbamos llegar con demasiado peligro a la portería de Aouate. Sólo una ocasión remarcable en los primeros minutos: un mano a mano de Messi con Aouate que el argentino trató de definir con una vaselina y el israelí aguantó muy bien para acabar sacando el balón con la cara. El Mallorca, por su parte, fiaba su partido a cazar una contra y tuvo su ocasión con un cabezazo de Álvaro que se marchó fuera por poco. El partido estaba así de trabado, hasta que se desatascó en cierta manera con el primer gol del partido, obra de Messi (quién si no): falta lateral que bota el argentino y que nadie parece tocar (aunque hay duda de si lo hace Alexis); el balón bota y se acabó colando pegado al poste de la portería bermellona. El gol llegó en el minuto 25 y el acta del árbitro se lo da a Messi. En el minuto 33, a punto estuvimos de sentenciar el encuentro, pero el disparo de Alexis se acabó estrellando en el larguero tras tocar en un defensa. Con ese exiguo resultado se llegó al descanso.

Y en la segunda parte, como ya nos ocurriera hace pocas jornadas en casa ante el Sporting, el partido se nos complicaba por una expulsión rigurosa. Esta vez fue Thiago quien vio la segunda amarilla por una supuesta mano en el minuto 11 de la segunda mitad. Y lo cierto es que teníamos 34 minutos por delante en inferioridad y esta vez el reto era fuera de casa. Por lo menos, al contrario de lo que ocurriera ante el Sporting, no sufrimos el mazazo de recibir el gol del empate poco después. De hecho, fue Messi quien estuvo más cerca de hacer el segundo. A pesar de que el Mallorca no era capaz de llegarnos con excesivo peligro, conforme iban pasando los minutos, iban creciendo los miedos en nuestros interiores: miedo a perder el hilo de vida que nos queda. Así estaba el partido hasta que logramos el segundo gol, el que nos dio la tranquilidad definitiva: obra de Piqué tras aprovechar un disparo al palo de Messi. Era el minuto 78 e hizo que, al menos, viviéramos con algo más de tranquilidad los últimos 12 minutos. Poco más ocurrió en el partido desde ese momento hasta el final.

Al final, importante 0-2 en situaciones adversas que nos permite mantenernos con este hilo de vida que nos ha dado el Madrid con sus últimos pinchazos. Mantenemos la desventaja de 6 puntos. La próxima jornada, en casa ante el Athletic. Pero ahora toca ya volver a pensar en la Champions: jugamos la ida de los cuartos de final en San Siro ante el Milán. Desde luego, no será una empresa nada fácil, y necesitaremos de toda nuestra concentración.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

lunes, 9 de abril de 2012

¿Vuelve a haber liga? Por segunda vez, decentes noticias desde Las Vegas. Osasuna - Getafe: 0-0 Barcelona - Granada: 5-3

Una jornada más (y ya van...), Osasuna y Barça jugaban el mismo día, uno después del otro. Como ya ocurriera en la jornada anterior, no pude ver ninguno de los dos partidos porque me pillaron de vacaciones en Las Vegas. De hecho, nunca olvidaré estos dos partidos porque fueron los que se jugaron justo antes (Osasuna) y mientras (Barça) jugaba un campeonato de póker en Las Vegas. Ambos los fui siguiendo, de manera intermitente, con mi móvil: consultaba el marcador cada cierto tiempo. Osasuna era el primero en jugar, en casa ante el Getafe (por cierto, obviamente, me lo perdí) a las 20.00 mientras que el Barça empezaba una hora después, en casa también ante el Granada.

Osasuna se encontraba con la primera oportunidad de sellar de manera provisional la permanencia llegando al mítico umbral de los 42 puntos. Es decir, tenía la oportunidad de cumplir el objetivo con 9 jornadas todavía para terminar la temporada. Así, podía centrarse en metas más ilsuionantes en esas 9 jornadas. Lo mereció, de hecho, pero no lo logró. La primera parte fue bastante disputada, pero si uno de los dos equipos se impuso sobre el otro, ese fue Osasuna. Hasta el minuto 20, no se vio la primera ocasión del partido: disparo de Lamah directamente fuera. Después, las más claras las tuvieron Cata Díaz para el Getafe (remate de espaldas que se marchó fuera por poco) y Nino para Osasuna (mano a mano que le sacó Moyá). Pero ninguno supo aprovecharlas y al descanso se llegó con el 0-0 inicial.

El guión de la segunda parte fue bastante similar al de la primera, pero esta vez las ocasiones llegaron únicamente del bando rojillo. La segunda mitad se puede resumir con dos acciones (una al comienzo y otra al final) y ambas protagonizadas por el portero azulón. En la primera, en el minuto 6 del segundo acto, le sacó un nuevo mano a mano a Nino. En la segunda, en el minuto 88, volvió a realizar un paradón a un zurdazo de Raúl García. De este modo, Moyá nos privó de la oportunidad de lograr los 3 puntos y haber dormido en Champions y conseguía un valioso punto para su Getafe.

Más o menos coincidiendo con el inicio de la segunda mitad en el Sadar, comenzó el encuentro en el Camp Nou. El encuentro fue bastante extraño: el Barça se puso cómodamente por delante con dos goles en la primera mitad, se dejó empatar en el inicio de la segunda mitad en unos minutos de caraja y tuvo que acabar recurriendo al de casi siempre para acabar imponiéndose, finalmente, con comodidad. El partido comenzó de la mejor manera posible: sólo habían transcurrido 4 minutos de partido cuando Cuenca desbordó por banda izquierda y Messi dejó el balón a Xavi para que el de Terrasa hiciera el primero. En el 12, Julio César se lucía con un paradón ante Messi, pero en el 17 no podía hacer nada ante el chut del argentino (nuevamente, tras desborde de Cuenca por banda izquierda). Esos dos goles no cambiaron el guión del partido: el Barça siguió con el control absoluto del balón y del partido, aunque, tal vez, sin ocasiones tan claras de gol (sólo una de Alexis en el 25). Al descanso, se llegaba con ese 2-0 y con la sensación de que el partido estaba visto para sentencia.

Pero el fútbol es así de maravilloso y en unos minutos de auténtica caraja, el Granada llegó a empatar el encuentro en los primeros minutos de la segunda mitad. En primer lugar, lograban el 1-2 en el minuto 55 en un cabezazo de Mainz a la salida de un córner, anticipándoese a Piqué en el salto. Y sólo 5 minutos después, Alves cometía penalti sobre Dani Benítez para que Siquieira pusiera el empate y el miedo en el Camp Nou. Pero el Barça volvió a reaccionar y lo hizo gracias al de casi siempre. Messi volvía a poner al Barça por delante en el minuto 68 (no habían pasado ni 10 minutos del gol del empate), tal vez en fuera de juego, tras un gran pase de Alves. Pero el partido seguía incierto puesto que el resultado aún era abierto. Así, hasta que en el minuto 81 el canterano Tello aprovechaba un rechace a un disparo de Messi para hacer el gol de la tranquilidad. Aún ocurrieron bastantes cosas desde ese momento hasta el final del partido: Messi hacía su hat-trick y el quinto del Barça en el partido en el minuto 85 tras un nuevo gran pase de Alves; el brasileño cometía un nuevo penalti (por mano) y era expulsado por doble amarilla; y Siqueira aprovechaba el lanzamiento de penalti (de panenka) para hacer el 5-3 definitivo.

De este modo, Osasuna perdía una buena oportunidad de mostrar sus credenciales hacia posiciones europeas, pero el Barça sí mantenía su racha y lograba mantenerse, al menos, a 8 puntos del Madrid. En ese momento, nos acostábamos a 5. La mejor noticia, en cualquier caso, llegó al día siguiente (justo antes de iniciar el vuelo de regreso desde Las Vegas) cuando me enteré de que el Villarreal le empataba al Madrid y la distancia quedaba en 6 puntos. Todavía es una distancia más que considerable, pero sirve para que se vuelva a reabrir el debate de si todavía tenemos liga o no. Pero como suele ocurrir, no hay tiempo ni para debatir nada, puesto que la próxima jornada se nos viene ya encima. El Barcelona viaja a Mallorca y Osasuna viaja a Valencia a enfrentarse a un rival directo, el Levante.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Grandes noticias desde Las Vegas. Zaragoza - Osasuna: 1-1 Sevilla - Barcelona: 0-2

En lo que se está convirtiendo ya en una tradición en este tramo de la temporada, Osasuna y Barça volvieron a jugar el mismo día. Fue por cuarta vez consecutiva y esta vez fue en sábado y jugando primero Osasuna y luego el Barça. El resultado global volvió a ser positivo: empate de Osasuna en Zaragoza y victoria del Barcelona en Sevilla. He de decir que no vi ni seguí de ningún modo estos partidos, puesto que me pilló de vacaciones en Las Vegas.

Osasuna jugaba a las 18.00 con la clara intención de sumar puntos que le acercaran un paso más al puntaje tradicionalmente necesario para mantener la categoría y, al mismo tiempo, continuar metido en la lucha por puestos europeos. Enfrente estaba el colista de la categoría, el Zaragoza, muy necesitado para no ir despidiéndose de primera división. El partido no pareció tener mucha historia (ya digo, no pude seguirlo) y al parecer fue el típico partido trabado en el centro del campo sin ocasiones en uno u otro lado. De este modo, en el primer tiempo apenas hubo un par de acercamientos a portería rival para cada uno de los dos equipos, pero ninguna verdadera ocasión de peligro.

Tampoco se caracterizó la segunda parte por el número de ocasiones o por el buen juego. De hecho, hasta el minuto 85, no había habido ninguna ocasión para ningún equipo. Muchos cambios y mucho miedo a perder en ambos equipos, pero muy poco juego. Pero los últimos 5 minutos de partido tuvieron todo lo que no habían tenido los 85 anteriores. En primer lugar, se adelantó el Zaragoza por medio de un gol de Helder Postiga. Se trataba de un gol que les daba esperanzas (recordemos que son colistas a 8 puntos del cuarto por la cola), pero recibieron un mazazo enorme sólo 2 minutos después, con el gol de Roversio a la salida de un córner peinado por Cejudo. Ese gol mataba al Zaragoza y era muy valioso para nosotros. Pese a los intentos postreros del Zaragoza, el resultado no se movió y el partido acabó 1-1.

Inmediatamente después de este partido le tocaba el turno al Barça en el Sánchez Pizjuán ante el Sevilla. Se trataba de una verdadera final y de un partido complicadísimo para no dar por defenestrada la liga. El Barça jugó un partido realmente serio y se acabó imponiendo por 0-2 merced a dos goles en la primera mitad. El Barça arrancó muy bien el partido y ya antes del primer gol del partido tuvo un par de buenas ocasiones en los pies de Adriano y Pedro. El Sevilla también tuvo una con un cabezazo de Escudé. El primer gol llegó de libre directo excepcional de Xavi: la coló por la escuadra y Palop, a pesar de que la llegó a tocar, no pudo hacer nada. Iniesta perdonó el segundo minutos después, pero el que no lo hizo fue Messi en el 25. Nueva obra de arte del argentino: cañito a Spahic dentro del área y vaselina para superar a Palop. Gol de lo que es: un genio mundial. Antes de la media hora, el Barça tuvo otro par de ocasiones por medio de Xavi y Pedro. Pero el Sevilla reaccionó en los últimos 15 minutos de la primera mitad. En primer término, con un cabezazo al palo de Manu del Moral tras una indecisión de Valdés y Piqué. Kanouté también tuvo dos ocasiones en estos minutos. Pero no sólo hubo ocasiones del Sevilla, Pedro (bastante desafortunado en esta temporada, en líneas generales) y Cesc también tuvieron las suyas para el Barça. La primera parte terminó con el 2-0 y un muy buen Barça la gran mayoría del tiempo.

En la segunda parte no hubo tantas ocasiones como en la primera (tal vez, porque el Barça salió más a controlar), pero aun así ambos equipos gozaron de las suyas. El Sevilla las tuvo por medio de Manu del Moral en los minutos 66 y 83, pero no acertó el ex del Getafe. Iniesta en el 73 y Alexis en el 88 fueron los autores de las ocasiones del Barça. El resultado, sin embargo, no se movió. El 0-2 fue definitivo.

De este modo, Osasuna continuaba con esa media inglesa de empatar fuera y ganar en casa. Acabábamos la jornada fuera de puestos europeos (séptimos), pero con los mismos puntos que el sexto y a sólo dos del cuarto. El Barça, por su parte, cumplía su parte para continuar a 10 puntos del Madrid (al día siguiente nos enteraríamos que el Madrid empataría en casa ante el Málaga, dejando la ventaja en 8 puntos).

Sin tiempo para darle más vueltas a esta jornada, la liga continuaba con una nueva jornada entre semana. Osasuna recibía al Getafe y el Barcelona hacía lo mismo con el Granada. Esta jornada, por cierto, me pilló nuevamente en Las Vegas.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

domingo, 8 de abril de 2012

Tercer buen domingo consecutivo. Racing - Barcelona: 0-2 Osasuna - Athletic: 2-1

Por tercera semana consecutiva, mis dos equipos preferidos jugaban el mismo día, otra vez en domingo. Al contrario que en las dos jornadas anteriores, esta vez tocaba ver primero al Barça (por la televisión) y luego a Osasuna (en directo en el campo). El Barça jugaba en Santander a las 18.00 y Osasuna recibía al Athletic a las 21.30. Ambos equipos lograron sendas importantes victorias.

El Barça jugaba en Santander con el regreso de Messi tras la suspensión por cinco amarillas como mayor noticia. El partido, a priori, era asequible. Jugábamos ante uno de los más firmes candidatos a acabar descendiendo a segunda división. No fue el mejor partido del Barça (estéticamente hablando), pero ganó con relativa comodidad y, prácticamente, no sufrió en ningún momento a lo largo del partido. Sin hacer nada del otro mundo, el Barça tuvo cuatro ocasiones importantes en la primera media hora antes del único gol que subió al marcador (Pedro, Messi, Iniesta y Cesc). El gol acabó llegando en el minuto 29, obra de Messi a bocajarro a pase de Cesc. Con ese único gol, se llegó al descanso. 0-1.

La única duda del partido estaba en el resultado, puesto que un 0-1 es un resultado demasiado abierto. A pesar de que el Racing no estaba acercándose a nuestra portería, con un resultado tan corto, cualquier error nos podía condenar. Por esa razón, era importante hacer el segundo cuanto antes, para no vernos con problemas en los minutos finales. Y ese gol llegó en el minuto 11 del segundo acto, merced a un penalti sobre Cesc transformado por Messi. Minutos antes, Cuenca había tenido una buena oportunidad. Cuenca (disparo al larguero), Messi por dos veces, Tello e Iniesta tuvieron sus oportunidades para haber puesto el tercero, pero el resultado no se movió y el partido acabó con 0-2. El Racing, por cierto, demostró que es un firme candidato a descender y ni siquiera tuvo una sola oportunidad de gol en los 90 minutos.

Tras ver el partido del Barça, me dispuse a bajar al Sadar con mis dos amigos habituales. El partido que nos disponíamos a ver era un auténtico partidazo. Nos enfrentábamos a una de las sensaciones en Europa esta temporada, el Athletic de Bielsa, que venía además de dar una exhibición en la eliminatoria de la Europa League ante el Manchester United. Los leones nos sacaban dos puntos de ventaja, por lo que era el partido que debíamos ganar para definirnos claramente como candidato a jugar la próxima temporada en Europa. El Athletic, por cierto, me dejó la sensación de ser un equipo que intenta jugar siempre al fútbol desde atrás (lo que se agradece, como espectador), pero que pierde demasiados balones en posiciones muy peligrosas (por ese estilo de juego que intenta imponer Bielsa), lo cual les condena. Osasuna se adelantaba además en el marcador con un gol de Iturraspe en propia puerta tras un buen saque de falta de Puñal. El Athletic reaccionó y estuvo cerca de lograr el empate, pero el disparo de De Marcos se estrelló en el palo. El que sí acertó fue Raúl García, con un cabezazo tras una nueva falta sacada por Puñal a las mil maravillas.

Trató de reaccionar Bielsa en el descanso con un doble cambio: entraron Ander y Llorente por Aurtenetxe e Iturraspe. De Marcos, polivalente, pasaba a jugar de lateral izquierdo. Llorente le dio la razón a su entrenador con un golazo a los 10 minutos de esta segunda parte que ponía el congojo a toda la parroquia rojilla. Osasuna, en cualquier caso, logró controlar bien el partido y apenas sufrió ocasiones del Athletic. Pero los minutos de descuento fueron de auténtica locura y nuestro portero volvió a salvarnos dos puntos. Primero Andrés sacó una mano prodigiosa a un disparo a bocajarro de Muniain (excepcional, el canterano rojillo), después Onwu (otro canterano) fallaba en el mano a mano con Iraizoz y, por último, a punto estuvo Damiá de liarla con una cesión atrás horrorosa. Al final, mantuvimos el 2-1 y logramos 3 puntos importantísimos.

De este modo, victorias esenciales tanto del Barça como de Osasuna. Al Barça le sirve para mantener la ventaja de 10 puntos en contra con el Madrid y Osasuna llega a 38 puntos (ya sólo quedan 5 para lograr la permanencia) y se coloca en puestos europeos y a sólo 2 de la Champions. Ahora, a pensar en la próxima jornada. El Barça tiene una nueva prueba de fuego en Sevilla ante el equipo de Míchel, mientras que Osasuna puede asestar un duro a golpe al Zaragoza, al que se enfrenta en la Romareda.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Messi, el extraterrestre. Barcelona - Leverkusen: 7-1 (+ balance octavos)

El Barça cumplió el trámite de la vuelta de octavos de final ante el Bayer Leverkusen, y lo hizo de una manera extraordinaria. Ni más ni menos que 7-1 y Messi batiendo un nuevo registro individual al hacer 5 goles en un único partido por primera vez en la historia de la Champions (aunque a punto estuvo de igualarlo sólo un día después Mario Gomez con el Bayern Munich). Lo de este chico parece no tener límite.

El partido no tenía demasiada historia, puesto que parecía imposible que el Bayer Leverkusen pudiera plantear ningún obstáculo en el camino hacia los cuartos tras el contundente 1-3 de la ida. Y así fue. Toda la historia que tuvo este partido fue ver cuántos goles hacía el Barça y más concretamente cuántos goles hacía Messi. Al final, fueron 7 y 5, respectivamente. Messi hizo goles de todos los colores y acabó convirtiéndose nuevamente en el centro de todos los focos tras hacer el quinto gol poco antes del final. Por primera vez en la historia, un único jugador hacía 5 goles en un mismo partido en esta competición. Cómo no, lo tuvo que hacer el mejor jugador del mundo. A la fiesta de Messi, se unió Tello con dos goles. El canterano, que había salido desde el banquillo, está siendo una de las sensaciones de la temporada y siempre que sale, lo hace bastante bien. Por lo demás, el partido no tuvo demasiada historia, como bien queda reflejado en el marcador. El Leverkusen, eso sí, hizo el gol del honor casi ya al final.

Además de esta eliminatoria, resuelta por un contundente 10-2 a favor del Barça, hubo otras 7. En sólo una de ellas había un representante español, el Madrid, que se deshizo también sin demasiados agobios del CSKA Moscú: 1-1 en la ida en Moscú y un contundente 4-1 en la vuelta en el Bernabéu. La sensación de la competición está siendo, sin lugar a dudas, el Apoel Nicosia, que dejó en la cuneta al Olympique Lyon en los penaltis tras perder 1-0 en Francia y ganar por ese mismo resultado en Chipre. Otra de las sensaciones estaba siendo el Basilea suizo, que ganó 1-0 al Bayern en Basilea, pero que no aguantó ante uno de los mejores equipos de Europa (probablemente, el tercero, tras Barça y Madrid) y terminó perdiendo 7-0 en Munich. Hubo varias eliminatorias que estuvieron tremendamente igualadas y en las que ocurrieron muchas cosas. El Milán, por ejemplo, eliminó al Arsenal tras dar una exhibición en San Siro, donde se impuso por 4-0. Sin embargo, sufrió más de lo que se pensaban en el Emirates tras una exhibición esta vez del Arsenal, que venció 3-0 y estuvo muy cerca de igualar la eliminatoria. El Chelsea, por su parte, sí que tuvo que remontar ante el Nápoles. Tras perder por 3-1 en Italia, acabó clasificándose al vencer por 4-1 en Stanford Bridge. El Inter de Milán cayó a manos del Olympique Marsella tras perder por 1-0 en Francia y a pesar de ganar 2-1 en casa, por el doble valor de los goles fuera de casa. Por último, el Benfica también tuvo que remontar en Lisboa el 3-2 de la ida cosechado en Rusia ante el Zenit. Logró vencer por 2-0 y meterse en cuartos de final.

Ya están sorteados de hecho los cuartos de final. Son estos:

Milán – Barcelona
Apoel Nicosia – Real Madrid
Olympique Marsella – Bayern Munich
Benfica – Chelsea

Sorteo muy benévolo con el Real Madrid, que se enfrentará a la “Cenicienta” y además con la ventaja de jugar la vuelta en casa. No tan benévolo el sorteo para el Barça, que se enfrentará al Milán, con quien ya compartió la fase de grupos hace unos meses. Al menos, sí que hemos tenido la suerte de jugar la vuelta en el Camp Nou. En las otras dos eliminatorias, muy favoritos Bayern Munich y Chelsea, respectivamente. No sólo se han sorteado los cuartos, si no también los emparejamientos de las hipotéticas semifinales: el Barça se cruzaría con el Chelsea (primero en Londres) y el Madrid con el Bayern (primero en Alemania, también). Es decir, podríamos tener una final Barça – Madrid, pero eso es anticiparse demasiado…

Antes toca deshacerse en primer lugar del Milán (no será fácil) y, si eso ocurre, después de Chelsea o Benfica. Y aún antes, toca centrarse en lo más inmediato: la liga. Antes de enfrentarnos al Milán en Italia tenemos varias jornadas de la competición doméstica por delante donde, recordemos, no podemos permitirnos ningún despiste. Lo más inmediato es el Racing en Santander. Desde ya, a pensar en ese partido.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!