Ronaldo decanta un partido igualado. El Madrid, campeón de la copa del Rey. Barcelona - Real Madrid: 0-1

Y llegó el segundo de los clásicos y lo que es más importante, llegó el primero (y único) de los clásicos que significaba para el vencedorla consecución de un título: la copa del Rey. En el primero de los partidos, “sólo” estaba en juego el que el Madrid siguiera o no siguiera vivo en la liga, mientras que en los dos siguientes no está en juego un título, si no el paso a la final de la Champions (y luego la puedes perder, obviamente). Es decir, podemos decir que se trataba del enfrentamiento más importante de los 4. Entendedme bien: no quiero decir que la copa sea la competición más importante (de hecho, es con toda seguridad la menos relevante de las 3), lo que quiero decir es que es el único partido que per se significa un título. Y en estas lides, Mourinho y sus equipos se desenvuelven como pez en el agua. Barça y Madrid nos volvieron a “regalar” un partido bronco, aburrido y con escasas gotas de calidad, con una parte para cada equipo y que pudo llevarse cualquiera de los dos equipos. Al final, ninguno concretó sus ocasiones y el encuentro se fue a la prórroga, donde Cristiano decantó la balanza hacia el lado merengue con un cabezazo excepcional. Guardiola volvió a ser fiel al estilo que tantos éxitos le ha dado y no engañó a nadie: sólo 2 cambios respecto al once de la liga, Pinto en lugar de Valdés en la portería (como ha venido haciendo en toda la competición) y Mascherano (sancionado en el encuentro liguero) por el lesionado Puyol. Mourinho, por su parte, sí que sorprendió un poco con su planteamiento y se dejó a los 3 delanteros de su plantilla (Adebayor, Benzemá e Higuaín) en el banquillo saliendo con Özil como falso 9. Por lo demás, sólo Arbeloa entró por el sancionado Albiol (expulsado en el encuentro de liga) desplazando a Ramos al puesto de central. Alineaciones iniciales:

BARCELONA: Pinto – Alves, Piqué, Mascherano, Adriano – Busquets, Xavi, Iniesta – Messi, Villa, Pedro
REAL MADRID: Casillas – Arbeloa, Ramos, Carvalho, Marcelo – Pepe, Khedira, Xabi Alonso – Ronaldo, Özil, Di María

La primera parte fue de claro color merengue. A pesar del planteamiento conservador del técnico madridista (que hacía prever un partido más parecido al de liga unos días antes), el Madrid salió a presionar arriba al Barça, consiguió maniatar a los de Guardiola (que no sentían cómodos) y, lo que es más importante, logró acercarse con peligro al área de Pinto. En esta primera mitad, el Madrid mereció el gol e irse con ventaja al descanso. Mascherano tuvo que sacar bajo palos un balón peligroso de Ronaldo y Cristiano siguió tentando a la suerte con lanzamientos que no llegaban a crear excesivo peligro para Pinto. Por lo demás, la primera parte fue una continua lucha, salpicada por entradas malsonantes, agresiones y tarjetas. La ocasión más clara del encuentro llegó cuando ya moría la primera mitad, cuando un centro excelente de Özil lo cabeceó Pepe de manera prodigiosa al palo ganando el salto a Alves. Es curioso como un jugador como Pepe (eminentemente defensivo) se ha convertido en los últimos encuentros en el estilete del juego de Madrid (no sólo del defensivo si no también del ofensivo!). La suerte quiso que ese balón no entrara y el Barça llegó vivo al descanso. 0-0 y tocaba reaccionar.

El Barça salió en la segunda mitad con una mentalidad totalmente diferente. Eran conscientes de que el Madrid había logrado imponer su estilo en la primera parte y había que incrementar el ritmo para lograr imponernos en el encuentro. De este modo, comenzamos a mover el balón con mayor velocidad y logramos de esta forma superar la primera línea de presión del Madrid, lo que suponía llegar con peligro al área de Casillas. Así, el Barça comenzó a monipolizar la posesión de balón y lo recuperaba muy rápido cuando lo perdía, imposibilitando las posibilidades de contragolpe madridista. Pedro, Villa, Messi, Iniesta comenzaron a aparecer más a menudo y a acercarse a las inmediaciones de Iker. De hecho, el Barça hizo gol en una de esas jugadas, pero el colegiado no anuló de manera correcta por fuera de juego de Pedro. Eran los mejores momentos del Barça, que tenía grogui al Madrid. Casillas mantuvo vivo a su equipo con tres paradones estratosféricos en los últimos minutos. Eso sí, la última ocasión del encuentro fue del madrid: excelente lanzamiento desde fuera del área respondido por un no menos excelente paradón de Pinto. Al final de los 90 minutos se llegó con el 0-0 inicial. Ciertamente, podía tratarse de un resultado justo, ya que había sido una parte para cada equipo.

De este modo, llegamos a la prórroga: 30 minutos adicionales. Parecía claro que el que hiciera el primer gol se iba a llevar el encuentro, y en la primera parte de la prórroga fue el Madrid el que acertó. Primero avisó Cristiano con un disparo que se marchó fuera por poco tras un excelente pase al hueco de Xabi Alonso, pero a la segunda no perdonó el portugués: buena jugada entre Marcelo y Di María por banda izquierda, centro brutal del argentino y cabezazo no menos brutal de Ronaldo para imponerse por alto a Adriano y dar la victoria y el título a su equipo. Me recordó el gol al de Messi en la final de la Champions de 2009 ante el Manchester por la plasticidad del cabezazo y la sensación de estar suspendidos en el aire. Golazo que bien vale un título. El gol llegó a 3 minutos del final de la primera parte de la prórroga, por lo que dejó al Barça con poca capacidad de reacción.

Eso sí, quedaban 15 minutos en los que intentar hacer el empate y llevar el encuentro a los penaltis, pero ante un equipo de Mourinho eso se me antojaba imposible. Como así fue. El Madrid supo defenderse con uñas y dientes y de hecho imposibilitó cualquier tipo de remate del Barça. Incluso estuvieron más cerca Ronaldo y Adebayor de hacer el segundo que el Barça el empate. Eso sí, y para dar la razón a Mourinho, Undiano terminó expulsando a Di María por doble amarilla con el tiempo ya cumplido. Otra vez el Madrid había tenido que jugar con 10 contra el Barça!

Al final, el golazo de Ronaldo le vale un título al Madrid. Un título que tiene triple valor para ellos, puesto que llevaban casi 3 años en blanco, llevaban casi 20 años sin ganar ese trofeo y encima lo logran ganándole a un súper-Barça en la final. Desde luego, no se puede decir que el Madrid no sea justo vencedor. Me limitaré a decir que cualquiera de los dos equipos pudo llevarse el partido. Eso sí, este triunfo puede suponer un espaldarazo para el Madrid en su objetivo de eliminar al Barça en semifinales de la Champions, y hace que sea todavía más atractivo el doble encuentro europeo. Habrá que ver cómo digiere el Barça la derrota, ya que es algo a lo que no están acostumbrados. Es ahora cuando hay que demostrar que seguimos siendo un grupo fuerte y unido y que una derrota no nos hace dudar de nuestras aptitudes. De momento, y como receso en el póker de encuentros ante el Madrid, ahora toca volver a la liga, donde se enfrentan contra mi Osasuna. Ojalá esta derrota les afecte en lo psicológico y Osasuna se pueda aprovechar de ello. Al fin y al cabo, si algo tienen ya ganado eso es la liga. Mejor que se reserven para el encuentro europeo en el Bernabéu! No toca ahora desearles suerte, pues, y sin embargo, le deseo toda la mala suerte del mundo y toda la suerte a Osasuna.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Un empujón hacia los puestos de descenso. Osasuna - Athletic: 1-2

Tras la dolorosa derrota de este domingo ante el Athletic en el Sadar, Osasuna ve ya muy de cerca los puestos de descenso. Esto, unido al complicado calendario que nos queda por delante hace que el pesimismo comience a hacer mella en mí y cada vez me vea más cerca de segunda la temporada que viene. En un encuentro que Osasuna debió ganar y debió hacerlo sin excesivos sufrimientos, acabamos dejando renacer al Athletic (con 10) y perdiendo tras un nuevo error clamoroso de nuestra defensa / portería (unido esto a una clamorosa falta de Muniáin, en cualquier caso).

La primera mitad fue bastante poco vistosa: demasiado juego en el centro del campo y pocos acercamientos a ninguna de las dos áreas. Sólo un par de lanzamientos de Camuñas desde fuera del área y una falta botada por David López que a punto estuvo de envenenarse sin que ningún atacante la tocara constan en el bagaje ofensivo de esta primera parte. De hecho, lo más reseñable de esta primera parte fue el encontronazo cabeza con cabeza entre Monreal y Gurpegi que acabó provocando una brecha en el jugador del Athletic, que tuvo que ser sustituido por David López. De este modo, a nadie le extrañó que al descanso se llegara con el 0-0 inicial.

Parecía un partido claro en el que el primero que hiciera gol se llevaba los 3 puntos. Y el primer gol lo hizo Osasuna: falta lateral botada por Puñal, la pelea por arriba Sergio y Sola a la media vuelta la manda a la red desde el interior del área pequeña. El gol fue pronto (minuto 51), pero daba la sensación de que era un gol que mataba el encuentro. Más aún cuando el Athletic se quedó con 10 al ver Castillo la segunda amarilla por una falta a Nelson cortando una contra del lateral cedido por el Betis. Ante un Athletic que había sido incapaz de crear peligro hasta ese momento y que encima se quedaba con un hombre menos parecía muy factible mantener el resultado, si no hacer el segundo que daba total seguridad. Ese fue el problema: Osasuna no fue a buscar dejar matado el encuentro y lo acabó pagando, y muy caro. Sólo un minuto después de quedarse el Athletic con 10, Osasuna estuvo muy cerca de hacer el segundo, pero el centro de Camuñas y desviado por un defensor se estrelló en el palo con Iraizoz ya vencido. Fue un espejismo y en el minuto 69, en el primer acercamiento del Athletic con peligro, Llorente cabeceó a la red un muy buen centro de David López. Demasiado premio para el Athletic, aunque justo castigo para un Osasuna demasiado conformista. Tras el gol de Llorente el partido transcurrió con la clara sensación de que se iba a terminar en empate. Osasuna estaba con uno más y debió haber buscado con más ahínco el segundo, pero no lo hizo o no pudo. Así estaba el encuentro hasta el par de acontecimientos que nos pueden mandar a segunda (como el fallo de la semana pasada en Gijón): primero Sergio volvió a ser expulsado en el minuto 87 al ver la segunda amarilla por cortar un contragolpe de Susaeta y ya con el tiempo cumplido Muniáin hizo el gol que nos condenó. La jugada tiene su miga: balón largo a la carrera de Muniáin a la espalda de Nelson, Ricardo sale de manera descontrolada ya que el lateral llega antes que el jugador del Athletic, Muniáin empuja de manera clarísima a Nelson, quien choca con Ricardo dejando el balón muerto para que Muniáin hiciera el segundo de su equipo. Es cierto que es un claro fallo de Nelson y Ricardo, pero no debió subir ese gol al marcador por la falta del atacante del Athletic. De todos modos, ya es la segunda jornada consecutiva en la que nuestros fallos defensivos nos cuestan 2 puntos (1 en cada jornada). Estos errores son de los que te acuerdas a final de año. Espero equivocarme…

Al final, 1-2 y nos vamos nuevamente con cara de tontos del estadio. La nota positiva, una jornada más, es que seguimos fuera de los puestos de descenso faltando una jornada menos, pero ya son sólo 2 los puntos y los puestos que nos separan de los puestos de descenso. Es cierto que quedan sólo 6 jornadas por delante, pero el calendario que tenemos es realmente complicado y mucho me temo que la próxima jornada podemos vernos ya metidos en los puestos de descenso. Esperemos que el Barça gane la copa y les pillemos aún borrachos de celebración, porque la próxima jornada visitamos el Camp Nou. Ni que decir tiene que en ese partido seré el mayor anti-culé del mundo (temporalmente), y más teniendo en cuenta que el Barça tiene ya bastante encarrilada la liga. Podían portarse y regalarnos los 3 puntos como hace un par de años…

¡AUPA OSASUNA!

Perdonamos la sentencia en una decepción de Clásico. Real Madrid - Barcelona: 1-1

Por fin llegaron los clásicos y la verdad es que el primero de los 4 combates decepcionó dadas las expectativas creadas. Guardiola fue fiel a su estilo aunque sorprendió dándole la titularidad a un Puyol que venía de una interminable lesión y parecía en la previa no estar 100% recuperado. Por su parte, Mourinho se decantó por un planteamiento tremendamente defensivo poniendo a Pepe en el centro del campo formando un trivote (ya lo había probado con éxito en San Mamés la jornada anterior) y dejando a su jugador más jugón (Özil) en el banquillo, para tratar de evitar el caudal ofensivo del Barça. Lo cierto es que lo logró (en parte), pero los aficionados madridistas deberían preguntarse si ese es el estilo que quieren para su equipo en un partido en casa ante su eterno rival. A mí personalmente no me gustaría. En punta, se decantó por Benzema dejando a Adebayor en el banquillo. Alineaciones iniciales:

REAL MADRID: Casillas – Ramos, Albiol, Carvalho, Marcelo – Pepe, Khedira, Xabi Alonso – Di María, Benzema, Cristiano Ronaldo
BARCELONA: Valdés – Alves, Puyol, Piqué, Adriano – Busquets, Iniesta, Xavi – Messi, Villa, Pedro

Las cosas del fútbol: si comparas ambas alineaciones, parecería que ambos planteamientos son muy similares ya que ambas son 4-3-3, pero lo cierto es que, aunque sobre el papel estamos hablando de la misma táctica, lo cierto es que son diametralmente opuestos. El Madrid, aunque a priori disponía de un 4-3-3, lo cierto es que en realidad se trataba más de un 4-5-1 que de otra cosa.

Ambos equipos salieron al campo con un gran respeto hacia el rival. El Madrid tenía aún fresco el 5-0 de la ida y era consciente de que no le podía jugar de tú a tú al Barça (lo cual es bastante triste, pero ese es otro tema que no voy a tocar), por lo que se dedicó a esperar atrás y tratar de aprovechar alguna contra. El Barça, por su parte, tampoco quería arriesgar en exceso para no dar pie a los rápidos contragolpes madridistas y además pensaba (no sin acierto) que el empate era un resultado positivo y que era el Madrid el que debía exponer algo más porque era el que en caso de no ganar decía adiós (o casi) a la liga. El Madrid, sin embargo, no fue a morder arriba al Barça y la primera mitad transcurrió con el toque, toque y toque del Barça pero no con excesivas ocasiones para ningún equipo. Tras un lanzamiento sin mucho peligro de Ronaldo, la primera gran ocasión del encuentro llegó en un balón a la espalda de la defensa de Iniesta para Messi que dejó solo a Messi delante de Casillas, pero el portero de Móstoles le adivinó la intención al argentino en su intento de vaselina. Esto fue casi en el minuto 20, lo que da una muestra de la clase de partido que vimos. Ese gol despertó al Madrid en parte, y comenzaron al menos a acercarse al área de Valdés, aunque sin poner a prueba al portero catalán (salvo en un lanzamiento de Benzemá). En el minuto 27 llegó uno de los momentos polémicos del encuentro con el penalti de Casillas sobre Villa, no pitado por el colegiado. Los 2 últimos minutos de la primera parte fueron de verdadera locura: primero Casillas salvó a su equipo en un tiro de Messi tras uno de sus típicos slaloms y luego Adriano sacó bajo palos un cabezazo a bocajarro de Ronaldo a la salida de un córner. Sin emabargo, el marcador no se movió y al descanso se llegó con el 0-0 inicial.

La segunda parte comenzó muchísimo más loca que la primera. En un minuto el partido pudo decantarse hacia un lado o hacia el otro. Primero Ronaldo estrelló un balón al palo en un lanzamiento de falta prodigioso y en la jugada siguiente, un balón largo de Busquets, se lo come Albiol y acaba haciendo penalti sobre Villa. Penalti y expulsión clarísimos, por supuesto. Messi tiró no muy bien la pena máxima pero batió a Casillas e hizo el 0-1 que dejaba la liga totalmente sentenciada. Quedaban más de 35 minutos con 0-1 y el Madrid con un jugador menos, por lo que daba la sensación de que el Barça podía lograr una victoria relativamente holgada. Sin embargo, el Barça desaprovechó la oportunidad, trató de dormir el encuentro cuando debió ir a buscar el segundo y permitió al Madrid resurgir de sus cenizas. A este respecto influyó el cambio por lesión de Puyol y la entrada al campo de Özil por Benzema. En la única ocasión del Barça, Xavi tuvo el segundo en sus botas, pero el balón se estrelló en el larguero. Desde ese momento, el Madrid comenzó a imponer su juego, a meterse en el partido (y a meter al público también) y a llegar a las inmediaciones de Valdés: Pepe, Ronaldo, Adebayor (que había entrado por Di María) tuvieron sus acercamientos. Así hasta que un error en la salida de balón del Barça en el minuto 81 (creo que fue Xavi), lo aprovechó el Madrid para forzar un penalti de Alves a Marcelo. La jugada es dudosa cuando menos. A mí no me parece penalti pero entiendo que pueda parecerlo. Eso sí, si se pita penalti es tarjeta amarilla para Alves, por lo que debía haber sido expulsado (era la segunda). Ronaldo lo lanzó de manera magistral para hacer el empate. De ahí al final, el Madrid aprovechó la inercia y pudo hacer el segundo. Bien es cierto que el partido se volvió loco en esos minutos finales y cualquiera de los dos equipos pudo hacer el segundo.

Al final, 1-1 y las cosas se quedan como estaban al principio. La liga queda prácticamente sentenciada (8-9 puntos a falta de 18 debería ser una distancia insalvable). Ambos equipos tienen motivos para salir contentos del encuentro: el Barça logra un empate en el campo de su eterno rival (lo que, a priori, es un resultado excelente) y además deja casi cerrada la liga y el Madrid logra empatar con uno menos ante un súper equipo como el Barça. Es decir, en el plano psicológico (muy importante dado que en unos pocos días se juegan estos dos mismos equipos la final de copa), ambos equipos pueden salir reforzados de este encuentro. Eso sí, yo me quedé con la sensación de que habíamos perdido una ocasión única para dar un golpe de moral brutal a nuestro eterno rival, por lo que en el componente psicológico considero que el Madrid sale algo más reforzado. De todas formas, debemos quedarnos con lo positivo y es que la liga la tenemos ya casi en el bolsillo. Ahora toca centrarse en el enfrentamiento de copa que seguro que será una historia completamente diferente.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Trámite cumplido. Shakthar - Barcelona: 0-1

El Barça cumplió el trámite de Ucrania y lo hizo de la mejor manera posible: con una nueva victoria gracias a un gol del mejor jugador del mundo, Leo Messi. El Barça partía con la ventaja del 5-1 de la ida, lo que marcaba de manera clarísima el encuentro, ya que, salvo hecatombe mayúscula, la eliminatoria estaba totalmente encarrilada. De todas formas, el precedente ante el Betis en copa del rey hacía que todos tuviéramos algo más de cautela de la queen realidad tocaba.

Lo importante era evitar el gol local en su previsible salida en tromba y lo cierto es que estuvimos cerca de complicarnos la vida. El equipo salió sin la tensión requerida y el Shakhtar, que es un gran equipo y crea peligro con mucha facilidad lo aprovechó para comenzar dominando el encuentro. De esta forma, Víctor Valdés (espectacular forma del portero catalán) tuvo que emplearse a fondo para evitar el primer gol ucraniano en un lanzamiento desde casi el área pequeña de Douglas Costa en el minuto 7. Un gol del Shakhtar en ese minuto habría puesto mucha pimienta al encuentro y a la eliminatoria pero VV estaba ahí para evitarlo. El Shakhtar siguió intentándolo en los minutos siguientes, aunque sin llegar en ningún momento a tener una ocasión tan clara, pero con el paso de los minutos se fue viniendo un poco abajo y comenzó a aparecer el Barça encarnado en la figura de Messi. Fue el argentino el primero en tener una ocasión para el conjunto azulgrana con un lanzamiento desde la frontal atajado por Piatov en el minuto 27. De ahí al final de la primera mitad, el Barça borró del mapa al Shakhtar y Adriano (sacó bajo palos su disparo un defensa), Messi de nuevo y Afellay tuvieron sus ocasiones, hasta que Messi, terminando ya la primera parte, acertó en una combinación con Alves para terminar de matar la eliminatoria. Aún tuvo tiempo Valdés de volver a lucirse antes del descanso en un disparo a la escuadra de Jadson en el descuento. De este modo, con 0-1 (1-6 en el global) se llegó al descanso.

La segunda mitad fue bastante menos vistosa (tampoco es que la primera fuera una oda al fútbol vistoso). En parte es normal ya que había poco o muy poco en juego. Comenzó con una nueva ocasión del Shakhtar que tuvo que sacar Adriano anticipándose al atacante, pero enseguida fue el Barça el que volvió a dominar el encuentro. Messi siguió creando pánico en la defensa rival y Víctor Valdés siguió acreditándose como uno de los mejores porteros del momento. El gol pudo caer para cualquiera de los dos bandos, pero como suele ocurrir en estos casos, el resultado no se movió. La segunda mitad sirvió para que Guardiola pudiera dar descanso a tres de sus piezas claves, una por línea, para tenerlos cien por cien listos para la ronda de encuentros ante el Madrid que se avecinan: Piqué, Xavi y Villa.

Al final, 0-1 y trámite cumplido de la mejor de las maneras. No sólo estamos en semifinales, si no que encima llegamos con 2 victorias y un global de 6-1 a favor. Ahora sí, ya se puede pensar en el Madrid. En primer lugar, tenemos el “intrascendente” encuentro de liga en el Bernabéu (pongo lo de intrascendente entre comillas porque, si bien es cierto que una victoria madridista no debería ponernos a temblar ya que mantendríamos 5 puntos de ventaja, sí que todo lo que no sea salir derrotado deja la liga casi cerrada. Además, ese primer partido tiene una componente emocional que puede influir en el resto de partidos de la serie). Cuando pase este primer encuentro, ya tendremos unos pocos días para pararnos a pensar en la final de copa y en las semifinales de Champions. Pero primero, tratemos de dar un nuevo golpe de efecto ganándole al Madrid en el Bernabéu y sentenciando la liga!

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Un fallo que puede costar una liga. Sporting - Osasuna: 1-0

En un partido importantísimo para la salvación, un error imperdonable entre Lolo y Ricardo condenó a Osasuna en un partido que debió acabar en empate sin goles. Ambos equipos llegaban igualados a puntos, pero el Sporting lo hacía tras su soprendente victoria en el Bernabéu y Osasuna tras ver truncada su excepcional racha con la derrota de la jornada anterior en casa ante el Atlético. El empate podía venirle bien a ambos equipos y durante muchas fases del encuentro pareció que se conformaban.

No fue así al principio, ya que el Sporting salió en tromba y en sólo un minuto ya había generado dos ocasiones de gol clarísimas (De las Cuevas y Barral) bien desbaratadas por Ricardo. El Sporting siguió creando peligro en esos minutos iniciales, pero con el paso de los minutos el partido se fue igualando y ya casi no se llegaba con peligro al área rival. Sólo dos lanzamientos desde fuera del área de Nacho Novo y de Camuñas inquietaron algo a Ricardo y Juan Pablo. Al descanso se llegó con el 0-0 inicial y parecía que ambos equipos estaban contentos con ello. Si no ocurría nada raro, lo más lógico era que se llegara al término de los 90 minutos con ese mismo resultado.

Pero lo raro ocurrió y Osasuna se dejó marcar un gol de manera incomprensible. La segunda parte comenzó como había terminado la primera: ninguno de los dos equipos hacía excesivos méritos para llevarse la victoria. Parecía que a ninguno de los dos les urgía hacer gol y daban por bueno el empate. Así estaba el encuentro hasta el fatídico minuto 65: balón muy sencillo para Lolo pero lo deja pasar de manera incomprensible pensando que Ricardo salía a por él, sin embargo, el guardameta no sale y el balón le queda franco a Barral para que haga el gol. Fallo garrafal de los que pueden costar una liga. Esperemos no echar de menos este punto a final de campaña. Osasuna acusó de manera brutal el golpe y no pudo reaccionar. Lo intentó con más corazón que cabeza, pero no pudo. Sólo un cabezazo de Nekounam a la salida de un córner se puede contabilizar como ocasión. De hecho, si algún equipo estuvo más cerca del gol que el otro, ese fue el Sporting. Al final, 1-0 y nos vamos de Gijón con cara de tontos.

Lo positivo de esta derrota es que seguimos a 5 puntos de los puestos de descenso con una jornada menos por disputarse, pero sólo de pensar que podíamos estar a 6, me pongo de una mala h… Total, quedan 7 jornadas (21 puntos) en juego y tenemos un margen de 5. Debería ser suficiente, pero la dinámica en la que estamos entrando no es la más positiva. Toca reaccionar y toca hacerlo ya puesto que el calendario de aquí a final de campaña es muy complicado. La próxima semana recibimos a un Athletic que viene de ser ridiculizado en San Mamés por los suplentes del Madrid, por lo que el león vendrá herido. Pero nosotros también debemos estar heridos en nuestro orgullo y debemos salir a morir. Esos 3 puntos tienen que ser nuestros! Mucha suerte, como siempre desde mi humilde portátil.

¡AUPA OSASUNA!

¡Menudo susto! Barcelona - Almería: 3-1

En lo que era el partido anterior al gran clásico ante el Real Madrid, el Barça logró una victoria sufrida y a punto estuvo de dar un buen susto. No jugó bien el Barça. Guardiola rotó buscando dar descanso y el equipo no estuvo en ningún momento todo lo fino que acostumbra. Aún así, no se puede hablar de victoria injusta, ni mucho menos. El Almería sólo llegó en una ocasión y fue gol.

La primera parte fue extremadamente aburrida. El Barça rondó el 80% de posesión pero tampoco llegaba en demasiadas ocasiones al área rival. El Almería por su parte, nada de nada. El Barça contó con 4 o 5 ocasiones en esa primera mitad, aunque sólo 2 de ellas fueran de las claras: un disparo alto de Thiago tras un jugadón de Bojan por banda derecha y un lanzamiento al palo de Messi cuando ya se terminaba la primera mitad. Iniesta, Bojan y el propio Messi lo intentaron, pero no lograban llegar con demasiado peligro a las inmediaciones del portero del Almería. La peor noticia de esta primera mitad llegó con la lesión de Bojan, que lo mantendrá alejado de los terrenos de juego hasta la próxima temporada. Con el 0-0 inicial se llegó al descanso. El Barça necesitaba ganar para no complicarse la vida y mantener la ventaja de 8 puntos de ventaja con el Madrid para su visita al Bernabéu, pero no lo lograba.

En la segunda parte el Barça salió con la clara intención de dejar el partido sentenciado lo antes posible. De este modo, ya en el minuto 3, Villa (negado de cara al gol en estas últimas semanas) estrelló un balón en el palo de Diego Alves. Pero sólo un minuto después, son las cosas que tiene el fútbol, en un córner lanzado por el Barça llegó el gol del Almería en una contra de libro entre Crusat, Piatti y Corona en la que falla de manera estrepitosa Gaby Milito (muy lejos de su mejor nivel) y en la que el canterano madridista adelantó al Almería en el Camp nou. En ese momento se vinieron encima todos los viejos fantasmas y ya me veía iendo al Bernabéu con sólo 5 puntos de ventaja. Había liga. Sin embargo, poco dura la alegría en la casa del pobre y sólo 2 minutos después un extraordinario pase largo de Milito lo aprovechó Villa para adelantarse a Alves y provocar un penalti clarísimo que Messi se encargó de transfromar. Menos mal que no dio tiempo ni a que nos pusiéramos nerviosos (casi). Tras el gol del empate, el Barça lo siguió intentando y Villa (por 2 veces) y Pedro tuvieron ocasiones clarísimas para hacer el segundo, pero no estuvieron finos. Tuvo que ser Thiago quien a la salida de un córner botado por Messi hiciera el gol mediada la segunda mitad. De ahí al final, fútbol control del Barça y pocas ocasiones de gol, sólo un remate en propia puerta de Acasiete y el gol en el descuento de Messi que hacía el 3-1 definitivo: error garrafal de Marcelo Silva y el argentino que no lo desaprovecha para plantarse solo ante Alves y batirle por alto.

Con ese 3-1 se llegó al final del encuentro. Al Barça le costó más de lo esperado deshacerse del colista en el Camp Nou, pero lo importante es que lo logró y llegará con 8 puntos de ventaja al partido del Bernabéu. Una derrota hubiera abierto la lucha por la liga de nuevo. Ahora toca desplazarse a Ucrania a cumplir el trámite ante el Shakhtar (siempre teniendo en mente el precedente del Betis) y el próximo fin de semana viajamos al Bernabéu. Parece un partido intrascendente (y más teniendo en cuenta que 3 días después se juegan la final de la copa), pero una derrota de cualquiera de los dos equipos podría o bien dejar la liga sentenciada o abierta a falta de 6 jornadas, junto con el correspondiente componente moral. Desde aquí, mucha suerte.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Iniesta nos guía hacia semifinales. Barcelona - Shakhtar: 5-1

El Barça dejó prácticamente sentenciado su pase a las semifinales de la Champions con un resultado abultado en la ida de los cuartos ante el Shakthar ucraniano en el Camp Nou. El 5-1 deja al equipo de Guardiola con pie y medio en la siguiente ronda y ya pensando en la atractiva semifinal ante el Madrid. A pesar de la diferencia en el marcador, lo cierto es que el partido tuvo mucha más historia de lo que se puede intuir del resultado.

Guardiola alabó al equipo de Lucescu en la previa y no lo hizo de cara a la galería (aunque sí es cierto que exageró bastante). El equipo ucraniano es un conjunto muy del estilo blaugrana: les gusta tocar el balón, profundidad con los laterales y sacar el balón jugado desde atrás. Sin embargo, ante el Barça, mostró una candidez en ambas áreas que fue la que finalmente terminó decantando el encuentro. Pero se trata de un conjunto muy conjuntado que además tiene unas excelentes individualidades con sus 4 atacantes brasileños y que puede poner en apuros a cualquier conjunto de Europa. De hecho, lo hizo ante el Barça también.

El comienzo del encuentro acabó marcando el partido. La primera jugada del encuentro fue una clara muestra de lo que el equipo ucraniano era capaz de hacer. Nada más sacar de centro hilbanaron una serie de toques que acabaron en una acción peligrosa que tuvo que solventar Alves. Justo en la siguiente jugada, en la primera combinación de ataque del equipo blaugrana llegó el primer gol: Iniesta tuvo suerte y aprovechó un rechace de la defensa ucraniana para plantarse solo ante Pyatov y no fallar en el mano a mano. A pesar del gol, el partido continuó abierto y ambos equipos llegaban con peligro al área rival. La defensa del Barça estuvo especialmente imprecisa y permitía que el Shakthar llegara con mucho peligro: William y Luiz Adriano tuvieron varias ocasiones de gol. El Barça también respondía y cada vez que se acercaba al área ucraniana daba sensación de peligro: Messi tuvo varias ocasiones, pero como digo lo cierto es que cada acercamiento del Barça era una situación de peligro. Al final, un excelente pase al hueco de Iniesta al desmarque de Alves lo aprovechó el brasileño para deshacerse del portero ucraniano y hacer el segundo a los 30 minutos. Ese 2-0 ya era un resultado excelente para el Barça y con ese resultado se llegó al descanso, a pesar de que el partido siguió en la misma dinámica.

La segunda parte fue muy similar a la primera. Ambos equipos llegaban con peligro pero sólo el Barça lograba generar verdadero peligro. Messi volvió a tener una nueva ocasión en lo que fue el preludio del tercer gol: córner ensayado que remata Piqué a la red con algo de fortuna. Era el 3-0 por lo que la eliminatoria quedaba prácticamente sentenciada. De hecho, Iniesta provocó una tarjeta amarilla que le hacía cumplir ciclo para perderse la vuelta y pasar limpio a semifinales. En cualquier caso, caprichos del destino, en la jugada inmediatamente posterior a la tarjeta de Iniesta llegó el gol del Shakhtar que acortaba distancias y abría mucho más la eliminatoria: falta lateral que Rakitskiy remató a la red. Lo bueno es que no tardó ni un minuto el Barça en volver a poner tierra de por medio: excelente jugada de Messi culminada por un misil de Keyta a la escuadra. Con ese gol volvía a estar la eliminatoria casi sentenciada. De ahí al final quedaba todavía media hora de juego. Media hora que transcurrió de forma parecida a como lo había hecho el encuentro: Luiz Adriano mandó un balón al palo, Iniesta tuvo la ocasión de hacer el segundo,… Al final, casi sin buscarlo, el Barça acabó encontrando el quinto gol tras una buena jugada colectiva terminada con un centro de Alves y un buen remate de Xavi.

Al final, 5-1 que deja la eliminatoria prácticamente sentenciada. Esto es una gran señal ya que la vuelta de semifinales es justo la semana anterior al gran clásico en el Bernabéu y una semana antes de la final de la copa del Rey. De este modo, podremos reservar piezas importantes para estos dos trascendentales encuentros. Un Shakhtar que buscó jugar de tú a tú con el Barça acabó siendo goleado por su candidez en ataque y en defensa. El Barça, sin hacer uno de sus mejores partidos, daba sensación de crear peligro con cualquier acercamiento al área ucraniana y acabó encontrando un resultado que tal vez sea demasiado abultado para las prestaciones de unos y otros. Ahora toca pensar en la liga y tratar de abstraerse de ese cuádruple enfrentamiento ante el Madrid que se nos viene encima en este final de abril. De momento, toca no descuidarse y solventar el encuentro ante el Almería sin mayor sobresalto para llegar al Bernabéu con los 8 puntos de diferencia actuales. Ya tendremos tiempo de pensar en el Madrid…

¡AUPA OSASUNA! Y ¡VISCA EL BARÇA!

Resucitamos a Diego Costa y al Atlético. Osasuna - Atlético: 2-3

Tras tres jornadas consecutivas venciendo y convenciendo y tras ver cómo llegaba el Atlético a Pamplona, nada hacía presagiar que el Atléequipo de Madrid se acabara llevando los 3 puntos del Sadar. Osasuna llegaba enrachado y el Atlético todo lo contrario. Además, Quique dejó en el banquillo a Forlán, por lo que (unido a la baja de Agüero) el Atlético llegaba a Pamplona bastante mermado en sus efectivos. Desde luego, yo no pensaba que íbamos a perder este encuentro y menos viendo cómo comenzó el mismo.

Y es que Osasuna salió muy bien y jugó una primera media hora bastante brillante: con posesión de balón, moviéndolo con mucho criterio y llegando con bastante peligro a la portería de De Gea. La banda derecha de nuestro ataque parecía la del Barça: Nelson parecía Alves y Cejudo parecía Messi. Por ahí llegaron todas nuestras ocasiones de peligro. A los 15 minutos, un centro del canario fue rematado por Soriano por dos veces y en ambas se encontró con la inconmensurable figura de De Gea. A la media hora, una buena jugada de Nelson por esa banda derecha tampoco supo aprovecharla el propio Soriano. El que sí acertó sólo un minuto después (31) fue Sola tras un remate de primeras a un centro raso de Cejudo desde esa misma banda. Tercera jornada consecutiva en la que “moja” el delantero de Cascante, por cierto. Ese gol fue un premio justísimo a una muy buena primera parte del equipo rojillo. Sin embargo, nos relajamos tras el gol y el Atlético lo aprovechó. Ya habían avisado antes con un balón a la espalda de nuestros centrales que tuvo que desbaratar Ricardo adelantándose a Diego Costa, y esa táctica (los balones a la espalda de nuestros centrales) fue la que el Atlético empleó para darle la vuelta al encuentro. Antes del descanso, en el minuto 38, un pase de Juanfran, un mal achique de Lolo y Diego Costa se planta solo delante de Ricardo. No falló el ex del Valladolid. Al descanso se llegó con ese mazazo: Osasuna había sido muy superior, sin embargo, al descanso se llegaba con un empate que dejaba el encuentro más que abierto.

La segunda parte fue un claro reflejo de lo que son estos dos equipos: fue una segunda parte verdaderamente loca, llena de errores, de alternativas, hubo goles, expulsiones. Osasuna echó a perder una muy buena primera parte con 10-15 minutos horrorosos (sobre todo en el plano defensivo y en la salida de balón desde la defensa). El equipo salió bien en la segunda parte y a punto estuvo de adelantarse de nuevo en el marcador por medio de Soriano, pero volvió a aparecer la figura de De Gea para salvar a su equipo. Sin embargo, a partir de ese momento el equipo desapareció del partido, tuvo infinidad de errores y regaló dos goles al Atlético que bien pudieron ser 3 o 4. Ya avisó el equipo rojiblanco con un remate a bocajarro de Reyes bien despejado por Ricardo. Sin mebargo, dos errores consecutivos en la salida de balón provocaron dos rápidos contragolpes del Atlético y dos mano a mano de Diego Costa ante Ricardo, que poco pudo hacer para evitar los goles. De esta forma, en el minuto 63 nos vimos con un 1-3 totalmente inesperado. Aún pudo ser peor porque en otro error en al salida del balón Monreal realizó penalti (en realidad era falta fuera del área, pero ya da igual), aunque Ricardo se lo detuvo a Reyes. Cuando parecía imposible que Osasuna se volviera a meter en el encuentro, un nuevo penalti en el minuto 80, este sí clarísimo por mano de Tiago en un lanzamiento de falta de Nekounam, lo aprovechó el propio iraní para recortar diferencias. Quedaban 10 minutos de juego, por lo que una re-remontada aún era posible. Sin embargo, a Sergio se le cruzaron los cables y propinó un codazo a Diego Costa por el que vio una justa roja directa, dejando a Osasuna con 10 para esos minutos finales. Poco pudimos hacer para buscar el gol del empate, aunque camuñas tuvo una ocasión ya en el tiempo de descuento.

Al final no pudo ser y acabamos perdiendo por 2-3 un partido en el que no creo que mereciéramos tal castigo. Sin embargo, si somos así de blandos en ambas áreas (perdonando tanto arriba y regalando goles abajo), es imposible que ganemos. No me puedo quejar del juego del equipo, que en líneas generales fue bueno, pero no podemos permitirnos tantos fallos. Al menos, y como nota positiva, seguimos teniendo los 6 puntos de ventaja respecto a los puestos de descenso a falta de una jornada menos (quedan 8), pero no tenemos un calendario fácil que digamos y aún nos faltan unos 7 puntos para asegurar la permanencia. A ver si en la próxima jornada mantenemos nuestro buen nivel de las últimas jornadas lejos de Pamplona y conseguimos un buen resultado en Gijón. Mucha suerte desde aquí.

¡AUPA OSASUNA!

Media liga ganada en el Madrigal. Villarreal - Barcelona: 0-1

Tras el inesperado pinchazo del Madrid en casa ante el Sporting, el Barça se plantaba en el Madrigal con la sorprendente posibilidad de dejar media liga sentenciada. En una jornada en la que parecía que lo más fácil era que el Madrid recortara puntos respecto al Barça, era el equipo culé finalmente el que se podía distanciar aún más de su inmediato perseguidor tras la derrota del Madrid por 0-1 ante los hombres de Preciado. Eso sí, esa derrota del Madrid tenía una segunda lectura y es que permitía a Guardiola reservar piezas para el trascendental enfrentamiento de cuartos de final de la Champions ante el Shakhtar. Eso hizo el técnico y, por ejemplo, reservó a Messi (que venía tocado de la semana de selecciones) dejándolo en el banquillo.

El Barça de la primera mitad fue un equipo plano, como echando realmente de menos al crack argentino. Parecía como si el resultado del Madrid hubiera influenciado de manera negativa y los jugadores hubieran salido excesivamente relajados. Fue gracias a Valdés que el equipo no se marchó a vestuarios con un resultado en contra, sobre todo en los compases iniciales. El portero catalán sacó dos balones a Rossi realmente peligrosos: uno con una buena salida a sus pies y otro despejando un peligroso tiro. Realmente eso fue lo más relevante de toda la primera mitad. Una primera mitad que verdaderamente se puede decir que fue aburrida, con un Barça que era el que dominaba la posesión (sin crear para nada peligro) y un Villarreal que sin tanta posesión de balón era el que gozaba de más y más claras ocasiones. Al final, lo mejor fue que finalmente llegó el descanso y al intermedio se llegó con el 0-0 inicial.

Sin tampoco ser todo lo arrollador que nos tiene acostumbrados, el Barça mejoró en la segunda mitad, como si se hubiesen dado cuenta de que se podía dejar la liga sentenciada en esta jornada. Pasó, al menos, a dominar el encuentro y a ser el equipo que generaba las ocasiones, sin dejar que el Villarreal gozara de excesivas ocasiones. De esta forma, ya avisó Villa con un lanzamiento tras una muy buena acción personal, pero se marchó fuera el balón. El asturiano continua negado de cara al gol. La entrada de Messi en el campo (por Keyta), sin cambiar la cara del equipo radicalmente sí que infundió miedo en el equipo castellonense, que ya no lograba llegar al área de Valdés con tanto peligro. El gol, de todas formas, hubo de llegar en un córner peinado en el primer palo y que Piqué voleó a la red tras controlar de manera cuando menos "sospechosa" (no se termina de ver claro en ninguna toma, pero sí que parece que se ayuda de la mano). Waka-gol que puede valer media liga. De ahí al final siguió el fútbol control del Barça que no permitió que el Villarreal tuviera más que una ocasión, mientras que Alves y Messi gozaron de las suyas. Pero bueno, la ocasión del Villarreal fue realmente clara: balón suelto en el área pequeña que le cae del cielo a Cazorla y la volea de éste la saca Valdés demostrando unos reflejos increíbles. Esa fue la última bala del Villarreal, por lo que los minutos pasaron y el partido acabó con el 0-1 señalado. Lo más reseñable de ese final de partido fue que Busquets y Valdés forzaron y vieron sus quintas tarjetas amarillas, con lo que se perderán el partido ante el Almería en casa de la próxima jornada pero estarán en el Bernabéu. Sorprendentemente, Messi, también apercibido, no forzó y si ve tarjeta frente al Almería se perderá el gran clásico.

Importantísima victoria del Barça per se, pero que encima se ve multiplicada por mil gracias a la derrota del Madrid. Ya el hecho de salir con 5 puntos de ventaja de esta jornada era muy buena noticia (la mayoría pensaba que podíamos salir con sólo 2 o 3 puntos), así que es fácilmente imaginable que salir con 8 es una noticia excelente. Ahora mismo son 8 puntos de ventaja con 8 partidos por jugarse (es decir, 24 puntos en juego). Ya sólo el Barça puede perder la liga. Este resultado permite, además poder afrontar el doble compromiso de cuartos de final ante el Shakhtar con mayor tranquilidad y poder tomarse el partido ante el Almería con suplentes, si fuera requerido. Ahora toca centrarse en el equipo ucraniano. Es un equipo con buen gusto por el fútbol y que seguro que nos va a poner las cosas muy complicadas. Desde aquí, mucha suerte y a ver si podemos sacar un buen resultado que nos permita viajar a Ucrania con algo de tranquilidad.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Un Osasuna embalado. Hércules - Osasuna: 0-4

Osasuna logró la tercera victoria consecutiva este domingo en Alicante. Hacía mucho, mucho tiempo que no recordaba 3 victorias consecutivas de Osasuna. Lo hizo además ganando nuevamente fuera de casa (de las 3 victorias consecutivas, 2 han sido lejos de Pamplona) y ante un nuevo rival directo, el Hércules, al que se le gana también el golaveraje particular. Pero es que encima sde hizo de una manera absolutamente contundente, por cero goles a cuatro.

Osasuna se aprovechó del mal momento por el que está pasando el Hércules y les pasó por encima, dejándoles hundidos en la última plaza de la clasificación y poniendo ya 9 puntos de ventaja con ellos. Osasuna hizo diana en su primer acercamiento al área de Calatayud y eso fue muy importante ya que acrecentó los nervios en el equipo herculano: excelente jugada de Vadocz y su pase de la muerte queda franco en el área pequeña para que Camuñas fusile sin remisión. Esto ocurrió a los 10 minutos de juego y sólo 2 minutos después pudo llegar el segundo en un disparo de Sola que se estrelló en el palo. Mediada la primera mitad el Hércules tuvo su mejor ocasión en una buena jugada de Drenthe por banda izquierda que terminó en gol, pero fue bien anulado por el árbitro porque el balón salió por la línea de fondo. Antes del descanso llegó el segundo del equipo rojillo: buen centro de Sola desde banda izquierda y Nelson volea a la red con algo de fortuna (el chut no fue del todo limpio). Al descanso se llegó con este 0-2 y con la parroquia local totalmente descontenta por la actitud de su equipo. Parecía claro que Osasuna se iba a llevar el encuentro.

El Hércules buscó el gol temprano que los metiera en el partido e involucrara a la afición. En el primer minuto, cabezazo de Valdez bien despejado por Ricardo y el rechace tampoco supo aprovecharlo Drenthe. Sin embargo, fue todo un espejismo ya que enseguida respondió Sola con un mano a mano malogrado por resbalarse en el último instante y al cuarto de hora de la segunda parte llegó el tercero, obra de Vadocz a la salida de una falta lateral. Si el Hércules tenía alguna esperanza, esta murió con ese tercer gol, y más aún cuando sólo 5 minutos después llegó el cuarto: excelente jugada de Monreal por banda izquierda (caño incluido) y su centro lo remata Sola a la red con un taconazo espectacular. Obviemante, los 25 minutos que transcurrieron desde el cuarto gol hasta el final del partido fueron de los llamados de la basura. Osasuna pudo hacer el quinto por medio de Sola, aunque también el Hércules pudo hacer el del honor por medio de Cristian (paradón de Ricardo). Al final, el resultado no se movió.

Excelente resultado de Osasuna que le sirve para llegar a los 35 puntos, mantener los 6 puntos de ventaja con los puestos de descenso (de haber perdido, nos hubiésemos quedado a tan sólo 3) y dejar al Hércules a 9 puntos en la última plaza y con el golaveraje ganado, por si acaso. Ahora toca tratar de buscar la cuarta victoria consecutiva el fin de semana que viene en casa ante el Atlético y dar un paso de gigante para la salvación. Mucha suerte y a ver si podemos dejar la permanencia asegurada lo antes posible!

¡AUPA OSASUNA!

Al final, sufrimiento innecesario. Barcelona - Getafe: 2-1

El Barça recuperó este sábado la senda de la victoria al imponerse por dos goles a uno al Getafe en el Camp Nou. A pesar de haberse merecido golear, el equipo terminó sufriendo y a punto estuvimos de llevarnos un mayor susto en el último suspiro.

El Barça dominó el partido desde el principio y las ocasiones fueron llegando por su propio peso. La primera gran ocasión del encuentro la tuvo Messi: pase al hueco de Xavi y el argentino que se la coloca y busca un remate de chilena, pero Codina había salido bien a tapar y blocó el balón. Arizmendi dio el primer aviso pasado el minuto 15 de que en frente había efectivamente un rival y Bojan respondió con una buena ocasión. El gol llegó poco depués: brutal disparo a bote pronto de Dani Alves desde la frontal que se cuela sin que el portero del Getafe pueda hacer nada. En el minuto 20 hubo una doble ocasión (precedida además de un claro penalti a Villa): primero Messi falla con la diestra tras haber regateado al portero y luego Villa no acierta con la portería en el rechace. Villa, que no está pasando la mejor de sus rachas, tuvo varias ocasiones antes del descanso, pero no acertó en ninguna. El Getafe, por su parte, sólo se acercó con peligro en una ocasión, pero fue una ocasión clarísima: disparo a bocajarro de Casquero que saca Valdés con los pies. A pesar de este susto y de los intentos del Barça por hacer el segundo, al descanso se llegó con el 1-0.

Nada más comenzar la segunda mitad el Barça se encontró con el segundo gol, obra de Bojan con algo de fortuna. Desde ahí hasta el final Villa continuó con su particular vía crucis y falló numerosas ocasiones clarísimas, en algunos casos por falta de puntería y en otros por tratar de ser demasiado generoso. De esta forma iban transcurriendo los minutos con la relativa comodidad del marcador, aunque el Barça comenzó a confiarse y a punto estuvo de pagarlo caro. Ya había avisado Manu del Moral con un remate de cabeza a la salida de un córner, y a los 86 minutos aprovechó la pasividad de la zaga blaugrana para recortar diferencias, haciendo que los 5 minutos finales de partido fueran de infarto. El equipo no supo adueñarse de la posesión en esos minutos y sufrimos en exceso. Xavi, por cierto, vio la 5ª amarilla por una tontería y se perderá el partido de la semana que viene ante el Villarreal. Albín, en el último suspiro, estuvo cerca de plantarse solo ante Valdés, pero falló en el control.

Al final, con más sufrimiento del esperado y del que se entreveía viendo el transcurrir del partido, el Barça se hizo con los 3 puntos gracias a los goles de Alves y Bojan y mantiene la renta de 5 puntos con el Madrid a falta de una jornada menos. Ahora toca viajar a Villarreal en una nueva salida complicadísima. Es decir, tocará sufrir para no permitir que el Madrid se ponga a sólo dos puntos antes de nuestra visita al Bernabéu. Y todo además después del parón para los compromisos internacionales. Lo cierto es que podemos complicarnos el tema un poco, aunque luego será el Madrid el que tenga que rendir visita a Valencia, Sevilla y Villarreal. De momento, vamos a quedarnos con lo positivo: quedan 27 puntos en juego y mantenemos los 5 puntos de diferencia. ¡Mucha suerte para el compromiso en Castellón!

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Pasos al frente. Aunque alguno no lo parezca. Osasuna - Racing: 3-1 Sevilla - Barcelona: 1-1

El domingo 13 de Marzo fue una jornada intensa en cuanto a fútbol se refiere. En primer lugar, Osasuna recibía a un nuevo rival directo como el Racing y, por otro lado, el Barça volvía a frontar una nueva salida complicadísima tras haber solventado de manera sobresaliente la última a Valencia. Ambos equipos cumplieron en la medida de lo posible: Osasuna se impuso con relativa comodidad por 3 goles a uno y el Barça se llevó un empate del Sánchez Pizjuán que, aunque ahora pueda no parecerlo (el Madrid nos recorta dos puntos y nos quedamos a 5), puede ser muy importante para el futuro de la liga.

El primero en jugar era Osasuna en casa ante el Rácing. Era el segundo partido consecutivo en casa que me perdía tras el empate sin goles ante el Deportivo. El partido era a las 17.00 hora española (12.00 hora de Canadá, donde me encontraba en ese momento y desde donde vi el partido). Osasuna salió con Kike Sola como delantero centro titular ante las bajas en esa posición. Y el canterano respondió a las mil maravillas. Suyo fue el primer gol del partido y él fue quien provocó el penalti que supuso el 2-0. Osasuna y Racing “regalaron” un partido bastante feo a los aficionados. Eso sí, la gente que bajó al campo salió encantadísima porque el partido fue bastante tranquilo para nuestros intereses. La primera parte fue bastante poco movida: Osasuna dispuso de 2-3 ocasiones de gol y el Racing ninguna. El primer acercamiento llegó en las botas de Cejudo con un disparo que se marchó fuera por mucho. A la segunda llegó el gol: buena jugada de Camuñas por banda izquierda, centro al segundo palo donde Cejudo la vuelve a meter al corazón del área y a Sola le da tiempo de controlar en el área pequeña y perforar sin remisión la meta de Toño. Bastante blanda la defensa santanderina. Además, pocos minutos después, en una contra de Osasuna, penalti absurdo de Christian a Sola que Nekounam se encarga de transformar. De ahí al final, nada de nada. Habiendo sido superior pero sin haber creado excesivo peligro Osasuna se marchó al descanso con un suculento 2-0.

Marcelino (entrenador del Racing) trató de hacer reaccionar a su equipo con un doble cambio en el descanso. Lo consiguió en parte, pero tampoco dio muestras en ningún momento de ser un equipo capaz de dar la vuelta al partido. Tal vez influyó el hecho de que Osasuna hiciera el tercero al poco de comenzar la segunda mitad: buena jugada de Osasuna por banda izquierda que acaba un tanto embarullada y acaba empujando Soriano a la red. Eso sí, sólo unos minutos después el Racing se volvió a meter en el partido con el gol de Rosenberg tras un grave fallo de Nekounam en la salida de balón. Faltaban casi 40 minutos de partido por lo que todo era aún posible. Sin embargo, tampoco el Racing fue capaz de poner en aprietos a Osasuna de ahí al final. De hecho, la ocasión más clara fue un mano a mano de Sola con Toño que se marchó fuera por poco. Un minuto después, y faltando aún 15 para el final del partido, Osasuna se quedaba con diez por la tonta auto-expulsión de Soriano al tocar un balón con la mano. El Racing entonces sí que gozó de alguna ocasión más (como un cabezazo alto de Rosenberg en el 84), pero el resultado ya no se movió. 3-1 terminó el partido en lo que supone la segunda victoria consecutiva del equipo y nos deja un colchón de 6 puntos con los puestos de descenso.

2 horas después del final del partido en el Sadar (21.00 hora de España, 16.00 hora de Canadá), el Barça jugaba una nueva final por la liga en Sevilla. El Madrid ya había ganado y se había colocado virtualmente a 4 puntos, por lo que era el Barça el que tenía la presión. El equipo respondió realizando una primera parte sencillamente brillante, dominando el encuentro desde la posesión y no permitiendo al Sevilla llegar en ningún momento con peligro. Y eso que parecía que el partido se iba a torcer al principio: primero el árbitro anuló de manera injusta un golazo de falta de Messi por presunta falta de Busquets en la barrera y luego Pedro se lesionó y hubo que dar entrada a Bojan. El Barça, a pesar de todos los inconvenientes, siguió fiel a su estilo y embotelló literalmente al Sevilla en su área. Aún así, el Sevilla reclamó y con razón un posible penalti de Alves a Zokora en una falta lateral. A la media hora acabó el Barça obteniendo premio a su fútbol total: excelente pase por encima de la defensa de Iniesta a Alves y el brasileño que se la deja a placer para que Bojan haga el 1-0. Tras el gol, el Barça siguió insistiendo y buscando un segundo gol que le diera tranquilidad, pero ni Villa ni Messi estuvieron acertados. El argentino gozó de la ocasión más clara con un cabezazo que se estrelló en el larguero con Javi Varas ya batido. En la última jugada de la primera parte Messi nos dejó a todos los culés con el corazón en un puño en una jugada en la que pareció lesionarse de gravedad, pero todo quedó en un susto.

El Sevilla reaccionó en la segunda mitad, en gran parte por la entrada al campo de Kanouté reemplazando a Zokora. Ese cambio le dio otra dimensión al ataque hispalense y creó muchísimos peligros a la zaga blaugrana. Además, en el primer acercamiento al área de Valdés el Sevilla obtuvo premio: muy bien Negredo aguantando ante Alves y Valdés y su centro atrás lo aprovecha Navas para empatar a puerta vacía. El Barça acusó el golpe y el Sevilla aumentó su intensidad. Los siguientes minutos fueron de auténtica incertidumbre y daba la impresión de que el Sevilla iba a remontar el encuentro. Negredo gozó de una ocasión más que clara (tras falta clarísima a Busquets, por cierto) que no supo aprovechar. Villa respondió con una ocasión en el otro área y comenzaba a aparecer Messi para amansar un poco a un Sevilla muy intenso. Navas derribó a Bojan dentro del área pero Pérez Lasa culminó su horrible partido con un nuevo fallo al obviar esa acción. Después llegaron 3 ocasiones consecutivas a favor del Sevilla: primero Valdés sacó un disparo pelgrosísimo de Navas y luego Kanouté no acertó en dos ocasiones. En unos minutos finales de infarto, el Barça respondió con 3 ocasiones también clarísimas: primero no llega Messi a un centro-chut de Bojan por milímetros, después Iniesta se estrella con el larguero con el portero ya batido y en el último instante Medel saca bajo la línea el disparo de Iniesta con Varas ya superado. Al final, tras una apasionante segunda mitad, el partido terminó 1-1. Un resultado que no termina de dejar contento a ninguno de los dos equipos.

El domingo nos deja a Osasuna 6 puntos por encima del descenso y al Barça con 5 puntos de ventaja sobre el Madrid. Osasuna además parece haber cogido una excelente dinámica que esperemos le permita apalabrar la permanencia sin excesivo sufrimiento. El fin de semana que viene ante el Hércules en Alicante, esperemos poder continuar con esa buena dinámica. El Barça, por su parte, realizó una primera parte sublime en la que mereció haber dejado sentenciado el encuentro, pero en la segunda mitad el partido se abrió mucho más y el Sevilla logró empatar. Lo justo hubiera sido una victoria, pero el fútbol es así. Vemos como el Madrid nos recorta dos puntos de ventaja y se situa a sólo 5 puntos, por lo que hoy más que nunca sigue habiendo liga. Eso sí, queda una jornada menos y ya sólo quedan 30 puntos en juego, por lo que 5 de ventaja (6 si contamos golaveraje) deberían ser en principio suficientes. Eso sí, esto nos hace que no podamos confiarnos y el próximo fin de semana ante el Getafe (en casa) habrá que no permitirse ningún error.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Espectacular Barça en un espectacular partido. Barcelona - Arsenal: 3-1

El Barça logró en un partido épico eliminar a un grandísimo rival, el Arsenal de Londres, y clasificarse para los cuartos de final de la Champions. No fue fácil ya que necesitó remontar el resultado adverso de la ida (perdimos 2-1). El partido tuvo de todo: dominio absoluto del Barça, polémica arbitral en ambos sentidos, incertidumbre hasta el final… Al final, lo que cuenta es que el Barça logró imponerse por 3-1 y da un paso enorme para recuperar el trono europeo perdido la temporada pasada. Este resultado, además, refuerza a los de Guardiola y le permite afrontar con mayor seguridad (más si cabe) el tramo final de temporada, en el que, recordemos, está envuelto en 3 competiciones.

El Barça dominó el encuentro desde su comienzo hasta el final. Sin embargo, y por estas cosas que tiene el fútbol, pudo quedar eliminado. Hubiera sido injusto, desde luego. Guardiola salió con su once de gala: la única novedad era Busquets reemplazando al sancionado Piqué en el eje de la zaga y Mascherano supliendo el hueco dejado por el joven canterano. La mayor novedad del once catalán fue la inclusión de Adriano en el lateral izquierdo. El conjunto londinense, por su parte, salió con su once de gala (dada la baja de Walcott). El Arsenal no se asomó con peligro por el área de Valdés en ningún momento. La primera parte tuvo un claro color blaugrana, aunque el Arsenal lograba defenderse de manera correcta y apenas permitía llegadas con peligro de los de Guardiola. La mayor noticia de la primera parte fue la lesión del portero del Arsenal, Sczcesny, que tuvo que dar entrada a Almunia. Bueno eso y un penalti de Diaby sobre Messi escamoteado por el árbitro. En los minutos finales el Barça apretó aún más el acelerador y obtuvo el premio del gol: fallo estrepitoso de Cesc en la salida del balón del Arsenal (se permitió un lujo, la intentó dar de tacón, en una zona en la que no te puedes permitir esos detalles), balón recuperado por Iniesta que en una jugada velocísima mete un excelente pase al hueco a Messi para que el argentino hiciera un sombrero exquisito a Almunia y fusilara la red. Todo esto ocurrió en el descuento de la primera parte, pero ya antes había merodeado el Barça el gol con un disparo al palo de Adriano y un disparo de Messi a las manos de Almunia. El Barça obtuvo premio a su insistencia cuando ya parecía que la primera parte moría y con 1-0 se llegó al descanso. Ese resultado le valía al Barça para avanzar a cuartos por lo que el Arsenal debía plantear la segunda parte de una forma algo distinta.

No cambió su forma de jugar el Arsenal en el comienzo de la segunda parte y continuo siendo totalmente dominado por el Barça, pero se encontró con el empate en una jugada totalmente desafortunada para el Barça: córner que Busquets se introduce en su propia portería. Demasiado premio había obtenido el Arsenal: no había lanzado a puerta y había logrado un gol. Ahora el Barça debía hacer un gol para forzar la prórroga y dos para llevarse la eliminatoria. Reaccionó enseguida el Barça y Villa tuvo en sus botas el segundo un minuto después del gol de Busquets en propia puerta, pero no acertó el asturiano. Poco después llegó la rigurosa expulsión de Van Persie y el Arsenal ya si que desapareció por completo del campo ofensivamente hablando. Quedaba más de media hora para el final del encuentro y el Barça puso en marcha la apisonadora, pero el gol no llegaba, en parte por los paradones de Almunia y en parte por nuestros propios fallos. Así hasta que en el minuto 69 (minuto mágico), Iniesta se inventó un jugadón para que Villa prolongara su pase y dejara en un mano a mano a Xavi frente a Almunia. No falló el de Terrasa e hizo el gol que en ese momento mandaba el partido a la prórroga. Sin embargo, quedaban aún más de 20 minutos y parecía claro que ese partido no se iba a ir a la prórroga. De esta forma, sólo 2 minutos después del gol de Xavi, Pedro forzó un penalti que Messi se encargó de transformar. Messi, Alves y Afellay tuvieron en sus botas el cuarto gol pero ninguno acertó. El 3-1 era engañoso ya que un solo gol del Arsenal nos dejaba fuera. Y cuando el partido acababa y el Arsenal no parecía dar muestras de poder crear peligro, un fallo de Adriano dejó a Bendtner mano a mano ante Valdés. Menos mal que apareció providencial Mascherano desde atrás y le rebañó la pelota limpiamente. Partidazo del "Jefecito", que acabó lesionado tras esa jugada, por cierto. Con ese susto se llegó al final del encuentro, por lo que el partido acabó 3-1 y el Barça eliminó al Arsenal.

Excelente partido del Barça ante un Arsenal que no fue fiel a su estilo y lo acabó pagando. El Barça pasa de este modo a cuartos de final, donde se enfrentará al Shaktar Donetsk ucraniano. No es el rival que más me apetecí pero es el rival, a priori, con menos experiencia en las fases finales de la Champions. En el horizonte una hipotética y suculenta semifinal ante el Madrid, pero antes habrá que deshacerse del conjunto ucraniano, y seguro que no será fácil. Ahora, de momento, toca volver a centrarse en la liga, donde el fin de semana viajamos a Sevilla. Será un partido dificilísimo, pero de solventarlo habremos dado un paso de gigante para la liga.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Por fin llegó la primera victoria fuera. Málaga - Osasuna: 0-1

Osasuna logró la primera victoria de la temporada lejos de Pamplona y lo hizo en un momento importante: ante uno de nuestros rivales directos, el Málaga. El equipo volvió a mostrar esa mejoría que se intuía con la llegada de Mendilibar y fue superior en gran parte del partido al equipo malacitano. Eso sí, el gol tuvo que llegar en el descuento. Pero la alegría fue inmensa.

Osasuna realizó una muy buena primera parte: dominó gran parte de la posesión del balón y gozó de las ocasiones más claras. Eso sí, la gran mayoría de nuestras ocasiones fueron a balón parado, ya que tampoco conseguíamos hilbanar jugadas con excesivo peligro. Eso que empezamos nerviosos el encuentro y las primeras llegadas fueron del equipo de la costa del sol, pero Nekounam en el ocho tuvo la primera gran ocasión del encuentro y desde entonces hasta el final de la primera parte, cada jugada a balón parado a favor de Osasuna parecía causar el caos en el equipo malagueño. Lolo, Nekounam, Sergio… parecían rematar con demasiada facilidad todas las jugadas a balón parado. Eso sí, tampoco hubo ocasiones excesivamente peligrosas y el resultado al descanso era el lógico en estos casos: el inicial, 0-0.

En la segunda parte cambiaron las tornas de manera drástica: el Málaga salió mucho más enchufado y Osasuna mucho más desenchufado. De este modo, el Málaga pasó como un ciclón por encima de Osasuna al comienzo de la segunda parte y sólo Ricardo y la falta de puntería del equipo de Pellegrini evitaron que el marcador se moviera. Dos veces Eliseu, otras dos veces sus propios compañeros en defensa y 3 veces Seba Fernández estuvieron muy cerca del gol. Especialmente claras fueron las dos últimas ocasiones de Seba. Sin embargo, el que falla lo acaba pagando y esa era la sensación que desprendía el encuentro. El único tema es que para hacerlo pagar, Osasuna debía acercarse al área rival, cosa que hasta ese momento no había hecho. 86 minutos tardó Osasuna en acercarse al área de Caballero, pero cuando lo hizo, lo hizo con muchísimo peligro: falta lateral y cabezazo de Soriano al palo y en el rechace tampoco acierta Nekounam. Los minutos finales de partido fueron de auténtica locura: primero el Málaga estuvo nuevamente cerca del gol, luego Caballero despejó a córner un cabezazo de Vadocz (en la que fue la única jugada de peligro de Osasuna no a balón parado) y en ese mismo córner Sergio hizo el gol de la victoria con un cabezazo espectacular. Aunque el gol fue en el minuto 92, aún hubo tiempo para que el Málaga estuviera cerca del empate. Al final, tras un partido bastante loco, Osasuna obtuvo un premio enorme: 0-1 y primera victoria a domicilio de la temporada.

Importantísima victoria de Osasuna porque nos permite una jornada más mantenernos fuera de los puestos de descenso (ahora mismo, 3 puntos nos separan de esos puestos), porque es ante un rival directo al que dejamos colista y a 6 puntos y porque puede ser una gran inyección de moral para lo que queda de temporada. Ahora podemos tener una semana relativamente tranquila y afrontamos con toda la ilusión del mundo el compromiso de la próxima jornada, también importantísimo, ante el Racing en Pamplona.

¡AUPA OSASUNA!

Keyta solventa la papeleta. Barcelona - Zaragoza: 1-0

Se enfrentaba el Barça ante el Zaragoza en casa tras la gran victoria cosechada entre semana en Valencia y justo antes de recibir al Arsenal en la vuelta de los octavos de final de la Champions. Es decir, el partido era doblemente trampa: por un lado podíamos caer en la complacencia de pensar que ya estaba todo logrado en liga tras la victoria en Mestalla y por otro podíamos caer en el despiste de pensar en el Arsenal sin acordarse de que en frente teníamos un rival que se jugaba la vida. Es decir, era un partido complicado, no tanto por el equipo que teníamos en frente si no por nosotros mismos. De este modo, tampoco Guardiola reservó un número excesivo de jugadores: sólo se permitió reservar a Abidal, Villa, Iniesta y Busquets. Pedro también fue reservado, salió como titular pero fue reemplazado a lo largo de la segunda mitad.

No jugó el Barça el mejor de sus partidos, aunque le sirvió para dominar el encuentro de principio a fin, en parte por un Zaragoza ultra defensivo. 20 minutos tardó el equipo en crear la primera ocasión del encuentro: obra de Pedro con un tiro desde fuera del área, muy bien respondido por Doblas. El portero del Zaragoza se lució durante esta primera parte ante los lanzamientos del Barça, aunque cabe decir que la mayoría de ellos fueron desde fuera del área (Xavi, Mascherano,…). La jugada polémica llegó con el gol anulado a Keyta, tras centro de Alves, por un supuesto fuera de juego (muy justo, pero parece que no lo es). Cuando parecía que la primera parte moría sin que el Barça fuera capaz de imponer su dominio en el juego en el marcador apareció Messi (hasta ese momento totalmente desaparecido) para hacer una de sus jugadas típicas (se fue de 3 o 4 rivales) y darle el pase de la muerte a Keyta. Esta vez no pudo hacer nada Doblas para evitar el gol del africano. Con ese gol psicológico se llegó al descanso. 1-0.

La segunda parte fue bastante parecida a la primera en el hecho de que el dominio del partido fue, de principio a fin, del Barcelona. Lo que ocurre es que ante un resultado tan ajustado en cualquier momento te puedes llevar un susto que te puede arruinar el encuentro. De hecho, la primera jugada de peligro fue del Zaragoza con un chut de Bertolo que se marchó fuera por poco. El Barça respondió con un cabezazo de Piqué a la salida de un córner que sacó Ander bajo palos, pero Valdés tuvo que salvar al Barça de nuevo al ganarle un mano a mano a Sinama. En cualquier caso, esa fue la última ocasión del conjunto maño. Sólo la incertidumbre del marcador tan ajustado mantuvo la emoción hasta el final del encuentro. Y esa incertidumbre en el marcador se mantuvo porque el Barça no fue capaz de aprovechar ninguna de las ocasiones de las que dispuso, en parte por las grandes actuaciones de Doblas y en parte por errores propios. Bojan, Messi, Villa, Maxwell... gozaron de ocasiones suficientemente claras como para no tener que haber sufrido hasta el final. Aunque, como ya he dicho, sufrir lo que se dice sufrir tampoco se hizo ya que el Zaragoza se mostró incapaz de crear peligro en los minutos finales.

De este modo, el Barça solventó la papeleta y se permitió reservar algunos jugadores para el tracendental partido de vuelta de los octavos de final ante el Arsenal del próximo martes. Lo mejor de esta victoria son precisamente los 3 puntos y el hecho de que se mantienen los 7 puntos de diferencia y queda una jornada menos para el final, por lo que el título de liga está un pasito más cerca. Ahora sí, toca pensar 100% en el partido ante el conjunto londinense: hbrá que poner cada uno lo máximo para poder remontar la eliminatoria y acceder a cuartos. Desde aquí, yo aporto mi minúscula contribución deseándoles toda la suerte del mundo.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!

Pasos al frente. Uno más grande que otro, desde luego. Osasuna - Deportivo: 0-0 Valencia - Barcelona: 0-1

En una de las escasas jornadas entre semana, Osasuna y Barcelona jugaban en miércoles, uno después del otro (Osasuna a las 20.00 y el Barça a las 22.00). Ambos compromisos eran muy importantes para los dos conjuntos.

Osasuna recibía en su campo al Depor de Lotina, un equipo que demostró que sabe defender a las mil maravillas. El partido fue soporífero y prácticamente no hubo ocasiones de peligro reseñables, pero como si de un combate de boxeo se tratara, Osasuna mereció vencer a los puntos.

Y eso que Osasuna salió con fuerza y en los primeros minutos de juego acumuló un par de acercamientos peligrosos (Cejudo y Lekic), pero pasados esos compases iniciales el ritmo del encuentro bajo muchísimo y se trabó en exceso. Sólo el debutante Cejudo parecía tener algo de claridad con el balón en los pies. La posesión fue para Osasuna en esta primera mitad (60-40 %), pero fue una posesión prácticamente infructuosa. Sólo un par de lanzamientos lejanos (Monreal y Guardado) quisieron llevar algo de peligro al área contraria. Por tanto, no es de extrañar que al descanso se llegara con el 0-0 inicial.

Tampoco salió Osasuna de vestuarios con una marcha más. Daba la sensación por momentos de que ambos equipos se conformaban con el empate. De hecho, hubo que esperar más de 20 minutos para ver la primera ocasión de esta segunda parte: excelente chut desde su casa de Nelson respondido con un paradón por Aranzubía. Esta ocasión pareció ser la chispa que prende la llama puesto que de ahí al final se sucedieron las ocasiones en una y otra portería. El Depor respondió enseguida con un par de ocasiones de Riki y Osasuna lo seguía intentando, pero ningún equipo obtenía fruto alguno. En los minutos finales Osasuna dispuso de un par de ocasiones bastante claras con un lanzamiento de Sola al palo y un cabezazo de Coro adelantándose a Aranzubía, pero el balón no quiso entrar y el resultado inicial no se movió. Al final, 0-0 que no puede ser catalogado como buen resultado, pero que al menos nos permite una jornada más mantenerse fuera de los puestos de descenso.

Justo después del partido en el Sadar, el Barça jugaba en Mestalla ante el Valencia uno de los partidos más difíciles que le quedaban hasta final de liga. Y logró un resultado espléndido que le permite afrontar con mayor desahogo el resto de jornadas. El partido fue muy igualado y no llegó en ningún momento a encontrarse el conjunto azulgrana cómodo sobre el campo. Sin embargo, en la primera mitad gozó de 3 o 4 ocasiones clarísimas que pudieron haber dejado el partido sentenciado.

Tras un buen comienzo de partido del Valencia, a los 10 minutos un rebote cayó a los pies de Messi que dispuso de una triple ocasión clarísima que entre Guaita y Ricardo Costa se encargaron de desbaratar. Mediada la primera mitad llegó la jugada polémica del encuentro con un gol anulado por fuera de juego de Jordi Alba (justo, pero creo que acierta el linier). Antes del descanso otra vez Messi y Villa dispusieron de ocasiones clarísimas, pero no fueron capaces de perforar la red, por lo que al descanso se llegó con 0-0.

En la segunda parte no hubo ocasiones de gol tan claras como en la primera parte, en gran parte porque el Valencia maniató aún más al Barça, que no lograba acercarse con peligro al área del portero valencianista. Tampoco el Valencia puso en grandísimos apuros a Pinto (nuevamente titular por la lesión de Valdés), pero sí que parecía que era el equipo che el que imponía su ritmo en el encuentro. Pablo, Soldado, Villa y Messi dispusieron de ocasiones de mayor o menor peligro, pero el partido parecía abocado al 0-0 inicial hasta que una muy buena jugada de Adriano por banda la terminó aprovechando Messi para hacer el único gol de la noche. El balón entró muriendo, por cierto. Esta jugada fue un fiel reflejo del partido: el Barça acabó imponiéndose, pero tras muchísimo sufrimiento. Bien es cierto que tras el gol el Barça supo matar el partido (aún quedaban 15 minutos) y no permitió que el Valencia se acercara con peligro al área de Pinto.

Al final, una jornada bastante buena para mis intereses. Osasuna sigue sin terminar de arrancar tras la llegada de Mendilibar y su arreón inicial, pero al menos continuamos una jornada más fuera de las posiciones de descenso. Mientras tanto, el Barça mantiene la ventaja de 7 puntos con respecto al Madrid con una jornada menos por disputarse y habiendo solventado con éxito uno de las salidas más difíciles. Aún así, esto no para y el fin de semana ya nos encontramos con una nueva jornada: el Barça recibe el sábado al Zaragoza con la mente de todos puesta en la vuelta de octavos de final de la Champions ante el Arsenal (con el peligro que ello conlleva) y el domingo Osasuna viaja a Málaga, donde se enfrenta a uno de los rivales directos en la lucha por el descenso. Tenemos que empezar a ganar fuera porque si no se nos va a complicar mucho la salvación. Desde aquí, mucha suerte a ambos equipos.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!