Alexis Sánchez

Uno de los culebrones del verano terminó con la llegada del chileno Alexis Sánchez al Barça. Estaba claro que el Barça necesitaba reforzar su ataque con un jugador versátil (capaz de jugar en ambos flancos del ataque e incluso por el medio) y joven. Dos nombres se fueron barajando durante todo el verano: Alexis Sánchez, del Udinese, y Guiseppe Rossi del Villarreal. Ambos jugadores cumplían perfectamente el perfil. Al final, todo era cuestión de qué equipo (Udinese o Villarreal) aceptara la oferta. Durante muchas fases pareció más factible el fichaje de Rossi, pero finalmente fue el de Udinese el que acabó firmando ante la negativa del Villarreal a vender. Particularmente, yo prefería la llegada de Rossi (un jugador que me encanta), pero también reconozco que es por el desconocimiento casi total de Alexis, de quien no había visto ni un solo partido completo.

Se trata de un jugador joven, 22 años (cumplirá 23 en Diciembre), nacido en Tocopilla, Chile. Es hijo de una familia muy humilde y sus comienzos fueron en los partidos de barrio en su ciudad natal. El primer club profesional en fijarse en su potencial fue el Cobreloa chileno, con el que debutó en 2005 a la edad de 16 años. Ahí llamó la atención de los ojeadores de Udinese, quienes lo firmaron a cambio de 3 millones de dólares. Sin embargo, aún era demasiado joven para jugar en la serie A, por lo que decidieron cederlo a Colo Colo, un grande de Chile, donde coincidió con Suazo y Matías Fernández y donde se proclamó campeón del Torneo Clausura 2006 y Apertura 2007. De ahí marchó a River Plate, un grande en Argentina, aunque una grave lesión truncó su carrera en el club de Buenos Aires. De ahí volvió a Udinese, donde tras un par de temporadas de adaptación, terminó de explotar la temporada pasada, ayudando a que su equipo terminara 4º con sus 12 goles. Ya en el Mundial demostró sus cualidades, llamando la atención de grandes clubes de Europa, pero Udinese lo declaró intransferible hasta junio de este año. Y en Junio, efectivamente, fue vendido al Barça por 37 millones de euros, por deseo expreso del propio jugador, rechazando ofertas más suculentas de conjuntos como el Manchester City.

Con la selección debutó en 2006 y en los últimos años, los de la era Bielsa, ha crecido junto con el conjunto, convirtiéndose en pieza muy importante de la selección.

No se trata de un jugador especialmente goleador (nunca ha destacado por eso), pero su crecimiento en los últimos años puede indicar que tarde o temprano pueda llegar a destacar también en esta faceta. Se trata de un jugador de banda de ataque, habilidoso y rápido, al que además se le ha inculcado desde siempre (el fútbol italiano y Bielsa son muy dados a ello) la disciplina defensiva. Esa disciplina defensiva es muy importante también para un entrenador como Guardiola. Se le apoda “el niño maravilla” y fue nombrado mejor jugador de la serie A el año pasado y “el jugador joven con futuro más brillante por delante” superando a jugadores de la talla de Bale o Pastore.

A mi parecer, se trata de un buen fichaje, un fichaje necesario para dar mayor profundidad de banquillo al ataque blaugrana. Probablemente no sea titular indiscutible porque tiene por delante a jugadorazos de la talla de Messi, Villa y Pedro, pero nadie duda de que disfrutará de muchísimos minutos. Al fin y al cabo, la temporada es muy larga. A lo mejor se puede considerar algo caro el fichaje, pero ya sabemos que un fichaje es barato o caro dependiendo del resultado que dé deportivamente, y estamos hablando de un jugador muy joven y con un gran presente y un mejor futuro por delante. Desde luego, espero que se amolde al esquema de Guardiola lo más rápido posible y podamos disfrutar de su calidad dentro de poco. Como siempre, toda la suerte del mundo desde aquí.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!