Casi se da el peor resultado. Barcelona - Osasuna: 2-0

Jugaban mis dos equipos y mi único propósito era uno: que no empataran. Me valía cualquier resultado salvo el empate. Ya se había dado ese resultado en el partido de la primera vuelta (aunque entonces, debido a las circunstancias en que se logró, tampoco me pareció tan malo) y no podía ser que se volviera a dar. No estuvo tan lejos, esa es la verdad.

Osasuna llegaba al Camp Nou tras varias jornadas sin conocer la victoria (muchas de ellas, saldadas con derrota, además) y el Barça lo hacía recuperando en parte su juego (al menos, eso parecía) y con un Messi en estado de gracia. Es decir, todo hacía prever que el Barça endosaría una goleada a Osasuna, quien, además, se presentaba en el Camp Nou sin 3 de sus delanteros (los dos titulares, Aranda y Pandiani + Dady) y ninguno en el once inicial (un 4-6-0, más o menos). Sin embargo, ni el Barça jugó bien, ni Osasuna lo hizo tan mal y el resultado estuvo cerca de acabar en empate a 0, lo cual, ya digo, no me hubiese gustado...

El partido comenzó con una ocasión para Zlatan que tiró demasiado inocentemente. Poco después, llegarían las dos únicas ocasiones de Osasuna en todo el partido (pero qué ocasiones! -sobre todo, la primera-): un disparo a bocajarro de Vadocz que sacó felinamente Valdés y en ese mismo córner un cabezazo de Nekounam fuera. Osasuna estuvo a punto de adelantarse en el Camp Nou y ahí sí que hubiera cambiado el encuentro (igual nos hubieran metido 6, pero el partido habría sido diferente). No lo hicimos y, al final, lo acabamos pagando. Y eso que no se puede decir que jugáramos mal (sobre todo, en la primera mitad): presionábamos bien, no dejábamos jugar al Barça y cuando robábamos el balón, lo movíamos con criterio. Lástima que no supimos profundizar algo más en ataque... Lo cierto es que la primera mitad acabó con más pena que gloria, sin ocasiones por ningún lado y sin ningún tipo de control del partido por ninguno de los dos equipos.

En el descanso, Guardiola motivó a los suyos diciendo aquello de "jugando así, no sólo perderemos un partido, si no que perderemos la liga". Lo cierto es que tardaron un mundo en salir en la segunda parte. Algo sí que se notó y el Barça salió con más ganas y jugó mejor en esta segunda parte, aunque tampoco avasalló a Osasuna. Que yo recuerde, los primeros minutos fueron de cierto agobio para Osasuna y luego sólo hubo un par de ocasiones antes del gol de Zlatan: un centro de Pedro al que no llega Messi por milímetros y un cabezazo de Keyta que saca Ricardo.

El gol de Zlatan llega en el minuto 73 tras una buena jugada made in Barça: apertura de Iniesta para la incorporación de Maxwell en el lateral y centro raso de éste al corazón del área donde Zlatan sólo tiene que empujarla. Obviamente, con ese gol en contra se acabó el encuentro para Osasuna (no teníamos delanteros, así que quién iba a marcar). Aún le dio tiempo al Barça de hacer otro gol tras una jugada similar a la del primer gol que culmina Bojan y a punto estuvo de hacer el tercero en un tiro de Messi al palo.

Buen partido de Osasuna en líneas generales (a pesar de la derrota, las sensaciones no fueron malas), malo del Barça (y aún así, le sirvió para ganar) y Messi que esta vez no apareció (menos mal). Por cierto, parece que los delanteros del Barça quieren entonarse (es necesario que lo hagan, la verdad)...

Esperemos que Osasuna rubrique estas buenas sensaciones el domingo en el Sadar ante el Almería y que el Barça mejore su juego y logre la victoria (tan difícil como importante) en un campo prácticamente inexpugnable esta temporada, el del Mallorca.

¡AUPA OSASUNA! y ¡VISCA EL BARÇA!